A propósito de que se cumplieron 3 años del ingreso de su pliego al Senado propuesto por el presidente, el juez entendió que “el drama en Rosario era el pie para introducir en el debate público la cuestión de que sería importante cubrir la vacante de Procurador General”. Así lo confirmó el propio juez Daniel Rafecas en diálogo con Tiempo Judicial.

El magistrado federal, Daniel Rafecas, afirmó que sigue “dispuesto” a ocupar el cargo de Procurador General y destacó que ese puesto “contribuirá a enfrentar el drama que vive Rosario”, as de cumplirse tres años del ingreso al Senado del pliego con su designación para esa función.

A través de su cuenta de Instagram, Rafecas recordó que “se cumplen tres años del ingreso del pliego al Senado para cubrir la vacante de Procurador General de la Nación”, en referencia al expediente enviado por el presidente Alberto Fernández y que tomó lugar formalmente en la Cámara alta el 12 de marzo de 2020.

El magistrado reiteró que sigue “dispuesto y preparado para ser convocado a la audiencia de ley, y ser sometido al escrutinio de los senadores y de la sociedad”.

El titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 3 de la ciudad de Buenos Aires consideró que “cubrir esa vacante contribuirá a enfrentar el drama que vive Rosario debido al crimen organizado”, y explicó que “tanto las fiscalías federales de esa ciudad, como la Procuraduría contra el narcotráfico (Procunar) dependen de la cabeza del Ministerio Público, que es el procurador”.

Rafecas señaló que el procurador es “quien además deberá poner en marcha el modelo acusatorio, más ágil, moderno y eficiente, en Santa Fe y en el resto del país (aprobado por ley en 2015)”.

“De cubrirse esa vacante, también avanzarían los concursos de fiscales federales pendientes, se podrían acelerar los juicios de lesa humanidad, tender a la paridad de género dentro del Ministerio Público Fiscal de la Nación (MPFN) y activar muchos programas pendientes”, completó.

El presidente Fernández envió al Senado en marzo de 2020 el pliego con la designación de Rafecas para sustituir a Eduardo Casal, designado interinamente durante la gestión del expresidente Mauricio Macri y que sigue en el cargo tras la falta de acuerdo en la Cámara Alta para nombrar un Procurador General efectivo con los votos de los 2/3 de los legisladores.

En números, la ciudad de Rosario, hoy se apresta a cubrir con urgencia el cargo en la Cámara Federal de Rosario y la puja por la fiscalía federal. En la justicia federal faltan ocho vacantes por cubrir de 30 cargos: una fiscalía de primera instancia, tres integrantes de tribunales orales y la Cámara Federal, entre otros.

¿qué pasó con el pliego frustrado?  Mirá...

La designación del Procurador General de la Nación según el artículo 11 de la ley orgánica del Ministerio Público Fiscal (MPF) dice textualmente: “El Procurador General de la Nación será designado por el Poder Ejecutivo nacional con acuerdo del Senado por dos tercios (2/3) de sus miembros presentes. Para ser Procurador General de la Nación se requiere ser ciudadano argentino con título de abogado de validez nacional, con ocho (8) años de ejercicio, y reunir las demás calidades exigidas para ser senador nacional”. Pero el oficialismo buscó sin éxito aprobar una modificación a esta normativa del Ministerio Público Fiscal.

Rafecas es él candidato elegido por el presidente y fue recibido en medio de la pandemia de coronavirus en la Casa Rosada en marzo del 2020. Se mostró orgulloso de su postulación en las redes sociales pero la duda pasa por determinar si el Congreso lo avalará con la vieja ley del MPF o si avanza un nuevo proyecto que flexibiliza los votos para aprobar el pliego por menos votos. Ninguno de los proyectos avanzó por la paridad en los votos en el Senado. 

Vale recordar, que el 14 de junio del 2021, los bloques de Juntos por el Cambio unidos firmaron un comunicado en el cual expresaron que "no hay procurador definitivo por culpa del oficialismo que nunca avanzó en el tratamiento del pliego del Dr. Rafecas en el Senado" en el cual recordaron que "la mesa nacional de JxC ha resuelto acompañar el pliego remitido por el Poder Ejecutivo Nacional a efectos de preservar la independencia del Ministerio Público tal como lo consagrada nuestra Constitución". El comunicado llevó la firma de Luis Naidenoff (UCR), Humberto Schiavonni (PRO) y Juan Carlos Romero (peronismo federal).

A 3 años justos de la postulación, el juez candidateado aprovechó la crisis en la Rosario con las amenazas de las bandas de narcotraficantes para pedir que se avance en el pliego, que es el único presentado.

Procuradores en los últimos años

Tras la renuncia de Alejandra Gils Carbó en 2016, la gestión de Cambiemos designó, con el aval del Senado, a Eduardo Casal como procurador General interino, cargo que continúa desempeñando actualmente en esa condición hace casi 4 años, insólito para un cargo interino.

Es un cargo vitalicio pero que desde 2004 empezó a temblar por las tormentas políticas de la famosa grieta. El "padrino jurídico" del presidente, Eduardo Righi, ejerció el mando de la Procuración General desde el 23 de junio de 2004 hasta el 9 de abril de 2012 cuando salió eyectado del MPF y de la función pública tras el escándalo del ex vicepresidente Amado Boudou y la compra de la imprenta Ciccone Calcográfica por la que fue condenado.

Luego, el interinato de Luis González Warcalde duró 4 meses, del 9 de abril de 2012 al 29 de agosto de ese año, cuando fue designada Alejandra Gils Carbó al frente de la Procuración General de la Nación con el voto de los 2/3 del Senado, y duró 5 años porque Macri como presidente impulsó su juicio político y denuncias en su contra forzando su renuncia y lo terminó logrando.

El caso Ciccone justamente tramitaba ante el juzgado de Rafecas y es resistido por legisladores opositores que tienen resquemores con aprobar el pliego de una persona que protagonizó un episodio raro en 2012 cuando mediante mensajes de texto el magistrado mantuvo conversaciones sobre la causa Ciccone con el abogado Ignacio Danuzzo Iturraspe. En diálogo posterior con este medio, Rafecas confesó que era una charla de amigos e informal.

En esa época, zafó del juicio político en el Consejo por sólo un voto. También la oposición lo recela porque en 2018 fue el juez que desestimó la causa por el Memorándum con Irán que había impulsado el ya fallecido fiscal Alberto Nisman. También es un juez experto en la historia de los crímenes de lesa humanidad cometidos en la Alemania nazi y llevó adelante varias investigaciones por delitos de lesa humanidad como la del Primer Cuerpo del Ejército.

Desde el 31 de diciembre de 2017, el procurador ante la Corte, el más antiguo y longevo de los fiscales federales, Eduardo Casal, asumió el cargo de Procurador Interino a la espera de la designación de la jueza Inés Weinberg de Roca propuesta por el ex presidente Mauricio Macri. Pero la política ni los votos alcanzaron para lograrlo. Pasa algo similar con el pliego de Daniel Rafecas, que aguarda las negociación política o que se cierra un poco la grieta para que un candidato que obtuvo cientos de apoyos y pocas abstenciones puede poner en marcha lo que todos en la justicia elogian: la implementación del Código Procesal Penal o el sistema acusatorio en todo el país. Justamente para acelerar, según cuenta en el Poder Judicial, con el juzgamiento del narcotráfico.