El Poder Judicial de la Ciudad de Buenos Aires condenó a un docente de una escuela técnica del barrio de Barracas a un año de prisión en suspenso por acosar sexualmente y abusar de su posición de poder sobre dos alumnas de la institución. La pena llegó a través de un acuerdo de juicio abreviado.

La pena fue impuesta por el juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 20, a cargo de la jueza María Luisa Escrich, a pedido del fiscal Adrián Dávila, titular de la Fiscalía PCyF Nº 36 especializada en Violencia de Género. El caso se inició con la denuncia de la madre de una de las víctimas, alumna de la institución donde el imputado imparte clases del Taller Soldadura.

La joven denunció que el acosador las hostigaba sistemáticamente, mirándolas fijo e intensamente en diversas partes de su cuerpo, rozándolas con sus genitales cuando las menores se encontraban realizando actividades de la clase, acariciándoles los hombros y la espalda, impidiéndoles finalizar sus trabajos para verse en la obligación de seguir concurriendo a clase, entre otras acciones.

El fiscal de la causa encuadró las conductas descriptas en la figura contravencional de acoso sexual doblemente agravado en razón de la minoridad de las víctimas y la desigualdad de género. Asimismo, mediante la declaración de las menores en Cámara Gesell, logró obtener diversas pruebas.

No obstante, las partes acordaron un juicio abreviado, en el cual el agresor reconoció los hechos imputados. Entonces, a través de un acuerdo de juicio abreviado, fue condenado a la pena de prisión en suspenso y diversas medidas de conducta por el término de 12 meses.

La pena es de cumplimiento en suspenso y por el término de un 1 año, deberá cumplir reglas de conducta consistentes en la prohibición de concurrencia a la Escuela en cuestión, prohibición de contacto con las víctimas, y la realización de un taller sobre violencia de género y otro sobre cuestiones sexuales.