El fiscal Fernando Arrigo, a cargo de la investigación por la tragedia de Once, calificó hoy como histórico el hecho de que se haya podido llevar adelante un juicio a ex funcionarios de un gobierno de turno, en alusión a los ex secretarios de Transporte Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi, entre otros 28 acusados. En tanto, explicó que el motorman que conducía la formación fue "negligente" y que "los frenos funcionaban mal y era pésimo el mantenimiento de las formaciones". Mañana, el veredicto del tribunal.

 

"Se hizo un juicio con funcionarios que pertenecían al Gobierno de turno. Eso es un cambio en la historia, es un hecho histórico", aseguró en declaraciones al programa Inimputables de radio América. "En la causa dejamos salud, tiempo y energía. La característica de los hechos hizo que saquemos energía de donde no la teníamos. Hubo un rol fundamental de las víctimas que impulsaron la causa", destacó el fiscal tras intensos años de trabajo en el último tiempo. 

 

Sobre el funcionamiento de las formaciones de trenes, Arrigo explicó que "había coches que hacía años que no se les hacía mantenimiento. El chapa 16 fue exigido: estaba sobrecargado y venía exigiendo al sistema neumático. Desde 2003 se empezaron a no hacer ni las reparaciones ni los mantenimientos".

 

El dilema está en acusar al maquinista, como hicieron durante todo el juicio las querellas de los empresarios y funcionarios, o la actitud que tomó el motorman Marcos Córdoba. "El motorman fue negligente. No aplicó el freno de emergencia. Los frenos funcionaron pero funcionaron mal. Las personas que dejaron la vida ahí son la bisagra de esta historia. Se hizo un juicio con funcionarios que pertenecían al Gobierno de turno. Hubo un cambio en la historia: se hizo un juicio rápido con funcionarios que pertenecían al Gobierno de turno".

 

El fiscal resaltó además el rol fundamental de los familiares de las 51 víctimas que dejó el accidente ocurrido el 22 de febrero de 2012, que fueron los que impulsaron la causa. El Tribunal Oral Federal 2 (TOF 2) dará a conocer su veredicto en la causa cuyo juicio tuvo 135 audiencias, y en la que además de Jaime, Schiavi y Córdoba, están imputados el ex dueño de Trenes de Buenos Aires (TBA) Sergio Cirigliano y la cúpula directiva de la empresa, entre otros.

 

El fiscal acusó en su alegato a Schiavi, a Jaime y a los ex titulares de la Comisión Nacional de Regulación de Transportes (CNRT) Eduardo Sícaro y Pedro Ochoa Romero, de no haber controlado la concesión de Trenes de Buenos Aires (TBA) y el funcionamiento del servicio. Pidió que Jaime sea condenado a 11 años de prisión y Schiavi a 10 años y 10 meses de cárcel por administración fraudulenta en concurso real con el delito de estrago culposo agravado.

 

Todas las defensas pidieron su absolución y apuntaron al motorman como único responsable del siniestro ferroviario, al igual que dos de las cuatro querellas que actúan en el juicio en representación de las víctimas y sus familiares.

 

En tanto, las otras dos querellas que agrupan a los familiares de las víctimas de la tragedia como la liderada por el tío de Lucas, Leonardo Menghini, así como el fiscal Arrigo entendieron que todos los acusados tuvieron responsabilidad en la tragedia de Once y pidieron que sean condenados por los delitos de administración fraudulenta y estrago.