A partir de la causa del femicida Fernando Farré que fue condenado a prisión perpetua por unanimidad por la votación del jurado popular por el crimen de su esposa Claudia Schaefer en 2015, la Asociación Argentina de Juicio por Jurados emitió un comunicado y explicó cómo funciona este sistema en Argentina. 

 

Una vez que los jurados escuchan los alegatos de clausura de las partes –donde la Fiscalía y la Defensa se encargan de repasar la prueba presentada en el juicio para demostrar porqué su teoría del caso es la correcta-, comienza la etapa de instrucciones al jurado y de deliberación. 

 

Las instrucciones son la información legal necesaria que el juez técnico le da a los jurados para que puedan deliberar y llegar a un veredicto. En las instrucciones, el juez explica qué deben tener en cuenta los jurados para valorar la prueba, cuáles son las cuestiones esenciales a decidir y qué normas rigen en la deliberación.  Toda esta información surge tras un debate que tienen las partes de la acusación y la defensa con el juez (sin la presencia del jurado).

 

Las instrucciones se comunican de forma oral, y luego se le hace entrega de una copia escrita a cada jurado para que puedan tenerla con ellos durante la deliberación.

 

Una vez entregadas las instrucciones, los doce jurados titulares pasan a deliberar de forma secreta y continua, mientras que los suplentes quedan liberados.  Lo primero que deberán hacer los jurados es elegir a un presidente, que será el encargado de ordenar la deliberación y leer el veredicto llegado el momento.  Cada jurado deberá expresar su análisis en base a los hechos del caso y la prueba producida, y finalmente, evaluarán si la fiscalía ha probado más allá de una duda razonable la acusación y arribarán a un veredicto de culpabilidad,no culpabilidad o no culpabilidad por inimputabilidad en este caso.

 

Si el panel de jurados tiene alguna duda sobre las instrucciones impartidas, pueden comunicárselo por escrito al juez, quien debatirá con las partes qué respuesta dar. 

 

La deliberación no tiene una duración preestablecida, termina solamente cuando se obtiene un veredicto de culpabilidad o no culpabilidad. El veredicto es el pronunciamiento del jurado con relación a la persona imputada. Para determinar la culpabilidad, se requiere como mínimo 10 votos afirmativos. Sin embargo, si el delito por el que se acusa tiene prevista una pena de prisión perpetua, se necesitará la unanimidad de votos afirmativos.  

 

Cuando el jurado llega a un veredicto, el presidente se lo comunica al oficial de sala y éste al juez. Los jurados vuelven a la sala de audiencia para que el presidente lea el veredicto.  Es importante resaltar que los jurados tienen la obligación de mantener en secreto absoluto su opinión y la forma en la que votaron. Los formularios usados para la votación y las notas del jurado se destruyen de inmediato una vez obtenido el veredicto.

 

Si el veredicto es de culpabilidad, el juez determinará la pena en una audiencia posterior que tiene con las partes y el condenado. Si es de no culpabilidad por inimputabilidad, en esa audiencia se evaluará si corresponde imponer una medida de seguridad.