"En enero había tan poco personal en la sala de autopsias que los trabajadores no tenían cómo tomarse las vacaciones porque no tenían quien los reemplazara, trabajaron 31 días sin franco", dijo a Tiempo Judicial Mario Alarcón, miembro de la comisión directiva de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nacion (UEJN), sobre la acumulación de trabajo en la morgue judicial por falta de cobertura de vacantes.
El gremio de los trabajadores judiciales hace dos años que está en conflicto con esa dependencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) que se encarga de las autopsias para los expedientes.
Según indicó Alarcón, la planta de trabajadores que integran la morgue no cambió desde los últimos 10 años. "Cuando se jubila un trabajador la Corte no cubre la vacante. Tampoco se hacen las promociones, nos están negando la posibilidad de ascenso", dijo.
La morgue judicial realiza aproximadamente 3800 autopsias por año. Los turnos de trabajo son cuatro, de seis horas cada uno; los trabajadores cuentan con las ferias al igual que el resto de los judiciales. Alarcón explicó que ante la imposibilidad de hacer horas extras por las características del trabajo, los empleados de la morgue se ven obligados a resignar sus francos quizás por 15 o 20 días que deben trabajar de corrido por la falta de personal.
Al conflicto particular de la morgue, que según indicó Alarcón es común a varias dependencias de la Corte, se suma que desde hace seis meses todos los análisis clínicos y toxicológicos de la Policía Federal por el cierre temporal de los laboratorios policiales de La Boca por las obras del llamado Paseo del Bajo. "Desde entonces se cuadruplicó el trabajo", manifestó Alarcón.
Alarcón explicó que debido a la falta de cobertura de vacantes, por ejemplo, en la oficina de histopatología hay cuatro técnicos, cuando en realidad debería haber ocho. "No va a faltar el personal que haga falta, el tema es que esos trabajadores después no se van a poder tomar franco o vacaciones", dijo.
En marzo comenzó el diálogo con la Corte para mejorar la situación de la morgue. "En septiembre tuvimos que retomar las medidas de fuerza", dijo Alarcón. Si bien se agregó personal en la oficina Contable, en la de Psicología y en la de Bioseguridad, son trabajadores "que no tienen que ver directamente con la morgue".
En cambio, en los puestos como técnico viscerador, que sí participa directamente en las autopsias, se incorporan trabajadores pero contratados, no en planta permanente. "La metodología de la Corte es nombrar contratados y dejarlos en ese estado durante cinco años para recién ahí incorporarlos efectivamente; en ese período pueden decirles tranquilamente que no vengan más", dijo Alarcón.
Otro problema que afronta la morgue es la falta de jefes en las oficinas: "La oficina de Fotografía no tiene un secretario jefe que se haga cargo, son todos directivos de cargo bajo".
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