Héctor y Gabriela ayudaron y cobijaron a dos menores en situación de calle que no tenían mamá y papá y hoy piden a la Justicia que no les saquen su custodia. Cuando la Justicia llega tarde, no es Justicia.
Héctor es Locutor Nacional, Productor Integral de Radio y docente y Gabriela es Directora de la Escuela N°26 D.E.4. La relación con ellos empezó por Gabriela, esposa de Héctor, en la escuela donde la niña “C” convivía con su mamá y 5 hermanos en un hotel cercano a la escuela, donde presenciaban hechos de violencia, expuestos a un lugar con roedores y cucarachas, descuidados y sin alimentación.
Sin padre, sin madre y sin hermanos que quieran verlos porque no se sabe nada de ellos y son todos mayores de edad, la Justicia determinó la guarda adoptiva “C” y su hermano “G” con Héctor y Gabriela durante el plazo de dos años que venció este 22 de diciembre de 2019.
Los hermanos no tenían familia, estaban solos en la vida y hoy la tienen gracias a Héctor y Gabriela. Si la justicia no resuelve rápido los chicos pueden quedar en la calle. Estamos desesperados porque la Justicia nos va a sacar a los chicos. Queremos que la jueza civil Agustina Díaz Codero al menos “escuche a los chicos”. Ellos están muy felices con nosotros en estos dos años que pasamos juntos.
La jueza civil Agustina Díaz Cordero determinó que consigan otra familia, pero nadie escuchó a los dos chicos. Los menores fueron cuidados durante dos años por Gabriela y Héctor como sus dos hijos y los dos chicos les preguntan con inocencia pero también con cruda realidad: “¿por qué la Jueza quiere buscarnos una familia, si ya tenemos una?, o ¿cuándo nos van a decir que nos quedamos por siempre con ustedes?. No entienden la dureza y la demora de una Justicia que no piensa en los chicos, sino en la burocracia judicial.
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