La desaparición de Maria Cash, ocurrida hace 10 años, continúa siendo una cuenta pendiente del Poder Judicial y del Estado en su totalidad. A raíz de que no se avanzó en las investigaciones llevadas a cabo, fue convocada por el Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (SIFEBU) del Ministerio de Seguridad de la Nación una Mesa Interinstitucional.
Dicho espacio estará encabezado por la Fiscalía Federal N° 2 de la provincia de Salta, a cargo del Dr. Eduardo Villalba y conformada por el SIFEBU, investigadores de Gendarmería y representantes de la familia. La Subsecretaria de Investigación Criminal y Cooperación Judicial, Valentina Novick, fue el quien realizó la apertura.
La coordinadora del SIFEBU, Leticia Risco, dijo que a la familia se la puso al tanto del progreso de la investigación en los 10 años. “Ese hecho condujo a que el Estado Nacional se proponga abordar la desaparición de personas con una perspectiva acorde, con normativas y procedimientos específicos, coordinada desde el propio Ministerio de Seguridad”, subrayó.
Además, la funcionaria explicó: “El Estado hoy continúa buscando a María y, por ello, evaluamos el caso y hoy expusimos en esta Mesa cuáles son las acciones realizadas y aquellas que se trabajan actualmente”.
“Además de la familia de Cash, también participaron del encuentro representantes de la Fiscalía interviniente en el caso y de la Gendarmería Nacional”, destacó Risco. El representante fue el Comandante Principal Gabriel Riveros, investigador designado ad hoc en la causa judicial a pedido de la propia familia de María.
Se detallaron distintas medidas adoptadas para que la búsqueda sea impulsada: rastrillajes realizados, el ofrecimiento de recompensa, la difusión del caso. También, se destacó que desde 2020 se han incrementado las acciones vinculadas con la capacitación y la articulación entre todos los organismos estatales que requieran trabajar en conjunto ante este tipo de situaciones.
El 8 de julio de 2011, se tuvo el último rastro certero María sobre la ruta 9, a la altura de la Difunta Correa en el norte argentino. Las líneas de investigación son varias, se coteja que haya entrado en una crisis, pero también que haya sido una desaparición forzada vinculada a la trata de personas.
Muerte de una testigo en 2019
Julia Leal denunció, en mayo de 2018, que su ex novio, un agente del Servicio Penitenciario Federal, formaba parte de una red de trata que habría mantenido secuestrada a María Cash en una casa de Campo Quijano.
En aquel entonces, Leal fue citada a declarar pero por contradicciones la justicia no tomó reparo de su declaración y no avanzó en la investigación. Eso llevó a su abogado, Sergio Chericotti, a dar un paso al costado del patrocinio, aunque ahora trascendió que también dimitió por amenazas anónimas que recibió durante el proceso, según indica el diario El Tribuno.
Tras ser amenazada en reiteradas oportunidades, Leal fue secuestrada y torturada según denunció vía redes sociales la "Mesa Nacional Julia Leal".
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