La Junta Federal de Cortes y Superiores Tribunales de Justicia de las Provincias Argentinas y la ciudad Autónoma de Buenos Aires reúne a los presidentes de las Cortes Supremas de cada una de las provincias argentinas menos la provincia de Buenos Aires. La entidad conducida por la titular del TSJ de Tierra del Fuego explicó el trabajo mancomunado de sus integrantes, la innovación que generó la pandemia y cómo se fueron adaptando los procesos judiciales a las nuevas tecnologías.
¿Qué piensa de la actualidad de la infraestructura judicial en el marco de su cargo como titular de Jufejus?
Ya antes de la pandemia se aceleró el proceso de digitalización porque ingresamos a un periodo colaborativo con la creación del Instituto de Innovación y Tecnología donde generamos programas y adquiríamos una nube judicial en ARSAT llamada “Nubejus” para que puedan acceder los poderes judiciales y generar desarrollos propios.
Estos desarrollos permitieron un avance digital enorme para todos los poderes judiciales provinciales y que da paso a otras aplicaciones unificadas, a audiencias virtuales, citación de testigos y por supuesto al expediente digital.
Luego tuvimos que capacitar a nuestros funcionarios y funcionarias para el emprendimiento en todas las provincias y ahora empieza la operativización de la nube. Es decir, unificar la gestión documental electrónica para tener procesos unificados, rápidos y transparentes para todas las justicias provinciales que se nuclean en la Jufejus.
¿La pandemia aceleró este proceso?
Totalmente porque había provincias muy avanzadas como San Luis pero otras no por motivos bien diferentes como por ejemplo la parte económica que implica la adecuación de las máquinas, el software y el hardware de los poderes judiciales que son muy costosos.
Esta necesidad que impuso la pandemia aceleró todo lo que es digital y en cada provincia dentro de Jufejus compartimos programas, aplicaciones e ideas dando solución y soporte junto al ecosistema judicial para dar respuesta a la sociedad.
¿La incorporación de tecnología va paliando otro gran problema para la justicia como lo es la falta de edificios judiciales por el volumen de las causas?
En Salta y en Mendoza últimamente se inauguraron edificios nuevos en distintos lugares y modernos y adaptados a la realidad actual. El tránsito de expedientes ha disminuido muchísimo ya que no hay aglomeraciones de gente ni abogados en los tribunales porque todo lo que antes se hacía presencial hoy mayoritariamente en las jurisdiccionales provinciales es por vía electrónica.
¿Qué novedades impuso la pandemia en la Justicia como el expediente digital?
El expediente judicial se impuso en varias provincias que no lo tenían como La Pampa, Santa Fe, Formosa y Chaco. El aislamiento y las distancias hicieron que hasta por cualquier método electrónico se tomaran audiencias, hasta por Whatsapp. Hemos crecido en tecnología rápidamente y beneficiosamente para todos.
Hasta hay varias provincias que incorporaron la inteligencia artificial para trámites administrativos como por ejemplo ya desarrollan el doctor Corbalán con el programa Prometea en la fiscalía porteña.
La digitalización superó esa brecha para lograr que los procesos judiciales sean más eficientes y eficaces. Por ejemplo con respecto a las notificaciones electrónicas que ya te llegan por email y te notifican si o si electrónicamente con un procedimiento de resguardo.
Este proceso es más claro y más transparente y al estar digitalizado el abogado tiene la posibilidad de enviar escritos a cualquier hora y el juez sabe que cuando ingrese a su despacho ya tiene las presentaciones listos para despacharlas.
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