Tras cinco años de la desaparición de Luna en Mendoza, el caso se reaviva tras el hallazgo de documentos que apuntan contra autoridades locales, poniendo en relieve que se trata de mucho más que un caso de violencia de género. Tiempo Judicial dialogó con Yanina, la hija de Viviana Luna, quien dio detalles del tratamiento judicial.
Viviana Luna desapareció en Potrerillos, Mendoza, en diciembre del 2016, cuando salió de su casa para ir a una entrevista de trabajo. Desde entonces, nada se sabe de ella.
La Justicia llevó a cabo rastrillajes en la zona, pero tras no encontrar indicios de Luna, la búsqueda activa se estancó, según contó Yanina, hija de Luna, en diálogo con Tiempo Judicial: “Siendo totalmente sincera, la justicia mendocina no buscó como tenía que buscar. No hicieron las cosas bien desde un principio. Pasaron muchas cosas por alto”.
Por esta razón, Yanina y su familia propusieron a la fiscal del caso, Claudia Ríos, incorporar a Marcos Herrero en el proceso de búsqueda, un investigador privado rionegrino especializado en la búsqueda de personas y rastreos con perros, pero dicha solicitud fue negada: “Marcos tiene más de 35 años de experiencia en rastreo de personas con perros. Cuando le presentamos la propuesta a la fiscal no la quiso tomar porque, según ella, Marcos no estaba capacitado y sus perros no estaban habilitados. Después de unos meses, averiguamos que lo podríamos traer a Mendoza por monto propio como perito de parte, abonando sus honorarios de forma particular”.
Fue así que Yanina, su familia y allegados comenzaron a juntar el dinero para contratar a Herrero, incluso con la realización de sorteos, bingos, rifas y otros métodos afines.
Finalmente, pudieron contratarlo y Herrero viajó a Mendoza. En septiembre del corriente año, Herrero y sus perros encontraron en un hotel abandonado en Potrerillos restos óseos que la ciencia comprobó que eran humanos, y que la Unidad Fiscal de Homicidios del Ministerio Público Fiscal informó esta semana que se trataban del cráneo de un varón, con lo que queda descartado que pertenecieran a Viviana Luna.
Sin embargo, al lado de los restos óseos también fueron hallados también un monedero “de no más de 30 centímetros” que pertenecería a Viviana Luna y una serie de notas coincidentes con las que se hallaron en la cabaña de su ex pareja, además de documentos que linkean este caso con la trata de blancas y un listado de nombres de relevancia en esa provincia, como el del exgobernador, diputado nacional por Mendoza y presidente de la UCR Nacional, Alfredo Cornejo, o el del juez Walter Bento, procesado como presunto jefe de una asociación ilícita que se dedicaría a pedir coimas a presos federales y cuya suspensión y desafuero está siendo analizada en el Consejo de la Magistratura de la Nación. En dicho papel aparecen los nombres de referentes policiales, judiciales e incluso de otras personas desaparecidas.
Aquí, la lista de nombres completa:
Verdadero o falso
Las hipótesis sobre si estos elementos fueron implantados o si son verdaderos cambian según el emisor, pero todas apuntan a una afirmación: la carátula del caso de Viviana Luna excede la falta de justicia ante un presunto hecho de violencia de género, sino que detrás de Luna hay intereses y manipulaciones que quedaron expuestas, aunque se desconoce aún a quiénes pertenecen. El lugar donde aparecieron los restos óseos encontrados por Herrero ya había sido inspeccionado en más de una oportunidad por los pesquisas.
Desde el Ministerio Público Fiscal investigan ahora los motivos de la aparición de estos hallazgos y apuntan contra Herrero. Y desde la Jefatura de la UFI de Homicidios y Violencia Institucional argumentaron que Marcos Herrero admitió haber manipulado evidencia en la escena, sin esperar la presencia policial ni contar con autorización judicial alegando que ni él ni la familia de Luna confían en el accionar de la policía.
Señalaron incluso que Herrero tuvo situaciones muy parecidas en investigaciones anteriores de las que fue parte, por ejemplo en Santa Cruz, donde también había hallado restos óseos con las mismas características que los encontrados en Potrerillos: quemados.
Sin embargo, la familia de Luna desconfía del accionar policial y judicial. Aseguran que la búsqueda de Luna tuvo interrupciones e irregularidades previas a la llegada de Marcos Herrero. Más aún, es la razón principal por la que decidieron contratar a este investigador, y lo respaldan ante las acusaciones.
“Yo no creo que Marcos Herrero viaje por toda la Argentina con un pedazo de cráneo en el bolsillo. Nosotros como familia pusimos todas nuestras esperanzas en él”, contó Yanina. Y sumó: “Esa casa abandonada donde estaban los restos óseos, según lafiscalía, ya había sido rastrillada,pero nunca quedóasentado en el expediente”.
“Para mí las pruebas son reales. Y si realmente alguien las puso, no creo que sea Marcos,a lo mejor los puso otra persona que quería que se supiera la verdad”, indicó también.
Con esto, Yanina argumenta su respaldo a Herrero, alegando que el adiestrador de perros se involucra en casos donde existen pujas de poder e intereses varios que corrompen el proceso de búsqueda de las víctimas.
El porvenir
Los medios periodísticos mendocinos sacan sus propias hipótesis, cuentan la historia de Viviana Luna y los avances de la causa. Se habla del trabajo de Marcos Herrero, de las personas que aparecen en la lista, del accionar de la Justicia.
Por eso, este medio intentó comunicarse con referentes de la Fiscalía de Homicidios del mencionado ministerio de Mendoza para mayor justicia en la participación de este artículo, pero expresaron que prefieren mantener silencio en pos de no interferir en investigaciones en curso y no “hablar antes de tiempo”. Con esto, se adelantan novedades en el caso próximamente.
De la misma manera, este medio contactó a Marcos Herrero, quien se mostró a disposición de dar declaraciones a la prensa, pero difícil de encontrar su disponibilidad.
A pesar de todos los rastrillajes en Potrerillos, no hay aún evidencia de la mujer desaparecida, pero hay evidencias de causas conexas que emergieron tras la llegada de Herrero a Mendoza y que podrían significar un contratiempo en la investigación sobre la desaparición de Luna.
“Queremos como familia que se sepa qué paso con mi mamá y que se haga justicia, que dejen trabajar a Marcos Herrero. Que la justicia mendocina deje de estar sentada en una oficina y busque a todas las desaparecidas de Mendoza, porque Vivianas Luna hay muchas en la provincia”, cerró Yanina.
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