De cara a la finalización del año, varios temas de debate en el Poder Judicial de la provincia de Buenos Aires se encendieron y buscan tener, al menos para el próximo año, un consenso que ayude a que la justicia se desenvuelva de una forma más activa. 

En esta oportunidad, Tiempo Judicial dialogó con la presidenta del Colegio de Magistrados y Funcionarios del Departamento Judicial de Bahía Blanca, Miriam Carpintino, sobre la actualidad judicial y los desafíos que asumieron las autoridades de la provincia en el cierre de año. 

Entiendo que el año se cierra con el pedido principal de autarquía ¿Crees que esté próxima? 

Estamos un poco lejos de lograr la autarquía, sería espectacular que el Poder Judicial contará con esos fondos y no estar dependiendo del presupuesto, pero no creo que este año se vaya a poder llevar a cabo. Mi duda fundamental es el tema de los fondos, pero aparentemente los fondos saldrían de distintas cuentas que se pagan en los juicios, si fueran así sería fantástico porque no sé dependería del presupuesto que cada año tanto la justicia, como a la educación, nos recortan bastante. Esto implicaría mejor equipamiento, mejor pago al personal, me parece que ahí está centrado el tema. 

También se ha cuestionado mucho en el Poder Judicial el famoso “techo de cristal”... 

Yo no he sufrido gracias a dios ninguna de estas situaciones qué me hayan entorpecido la carrera. Pero existe, por supuesto. La perspectiva de género, no solamente es una cuestión de darle más derecho a las mujeres, muchos dicen ‘bueno, pero ahora quieren el predominio’, queremos que nos respeten, qué nos den el lugar que corresponde, que no violen los derechos humanos de las mujeres y simplemente es eso... juzgar con igualdad. El techo de cristal existe también en todos los ámbitos y en el Poder Judicial también se da. 

¿En qué situaciones se pueden dar? 

Cuando se rinde, por ejemplo, para acceder a un puesto y hay condiciones de igualdad, y a veces superando el orden de mérito, eligen a los varones. Qué es un tema que no depende de una lamentablemente, existe y es lo que tenemos que luchar para que se vaya terminando. En mi distrito yo soy jueza de un Juzgado de Paz, y hay varias mujeres, tenemos en el fuero varias mujeres, en familia también, pero en los tribunales criminales me parece que tendría que haber más.

Existen reclamos sociales en cuanto a los tiempos procesales ¿Es difícil explicar el por qué? 

Es complicado darle a entender a la sociedad y a la persona que está afectada, por ejemplo, por una pérdida, pero la justicia tiene sus tiempos. Entiendo que a veces es muy lenta y tienen razón, pero eso está tomado de la mano de muchas situaciones como, por ejemplo, el Código. Fundamentalmente tiene muchas etapas, muchas notificaciones, esa demora hace que para el resto socia de la sociedad que no lo entiende, la persona afectada tampoco porque perdió a alguien, y no se puede explicar y más en este momento que hay un procedimiento, que hay que esperar la prueba, que hay que cumplir los tiempos porque no lo van a entender. 

Miriam Carpintino, titular del Colegio de Jueces de Bahía Blanca.

¿Se puede modificar? 

El tema es complicado, el sistema y nuestro Poder Judicial en general. Nosotros no nos regimos por lo que queremos, nos regimos por códigos. Tiene que ver con una actualización de los Códigos y fundamentalmente en que las modificaciones estén los que vamos a trabajar con esos Códigos, porque ha habido varios intentos de modificación, pero están muy alejados del trabajo cotidiano. A veces son modificaciones que salen para el momento y nos sirven. 

¿Hubo modificaciones en cuanto a lo tecnológico? 

Tenemos que seguir, no nos podemos quedar atrás. Llegó la tecnología en una situación que nadie la esperaba y se estaba trabajando paulatinamente en la búsqueda de el expediente digital y la pandemia agilizo y apuro todo. Así que en provincia de Buenos Aires se siguió trabajando, particularmente en el fuero de Justicia de Paz, que por ahí también somos lo más complicados, porque no tenemos buenos proveedores, no tenemos buena conectividad en las cabeceras. En el caso nuestro es La Plata y se complican esas situaciones, yo creo que esto también hay que seguirlo. Con la carga de los expedientes, el tema de notificaciones, yo creo que esto llegó y se va a quedar, tenemos que aprovecharlo. Pero tiene que ir de la mano de acompañar los equipos que nos proveen con las capacitaciones, porque para muchos son cosas nuevas. Los chicos jóvenes lo manejan como si fuera un libro de lectura, pero para uno un poco más grande es más complicado.

¿Cómo es la relación con la Corte de la provincia? 

En general el Colegio de provincia, estos últimos años con la gestión anterior y con la gestión nueva, tiene una buena relación con la Corte. Lo que pasa es que a veces se hacen los planteos y por ahí no tenemos la solución en el momento y en la forma que uno quiere. Pero te diría que buena…

Por último ¿Qué espera para el próximo año? 

Creo que para el próximo año sería importante primero ocupar todos los cargos que tenemos. Hay muchos cargos vacantes y no se puede exigir un servicio de Justicia óptimo cuando hay muchas vacantes, muchos jueces que están subrogando en dos juzgados a la vez con lo que eso implica, o a veces están con un fuero Civil y el otro de Paz, entonces creo que lo más importante sería cubrir todos los cargos que existen.