A raíz del Día Internacional de las Personas Adultas Mayores, 1° de octubre, la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), dirigida por la fiscal Mariela Labozzetta, realizó un informe sobre los femicidios que tuvieron víctimas mujeres adultas mayores desde el 2015 hasta el 2022. En el mismo, se afirmó que el 23% de los homicidios dolosos en la Ciudad de Buenos Aires tuvieron como víctimas a mujeres con ese rango de edad.

En el mismo documento, extraído del informe anual que realizan, se estableció que la violencia alcanzó a tanto a mujeres cis, como mujeres trans, y se ejerce la violencia desde la agresión psicológica, física, económica, simbólica y sexual. Fue relevante el hecho de saber que la mayoría ocurrió dentro del ámbito doméstico, y por sus parejas y familiares.  

Al respecto, Labozzetta en diálogo con Tiempo Judicial explicó que “este año la UFEM eligió desagregar la parte de adultas mayores, para ver si se encontraban algunas características en particular”, y señaló que “desde el 2015 hasta el 2022 hay 36 hechos que involucran adultos mayores, entre los 60 y 96 años”.

“Son centralmente en espacios privados, en el domicilio de la víctima”, detalló la fiscal y subrayó que “hay mucha preponderancia de la utilización de la fuerza y de ejecución manual de los crímenes a diferencia de otros por la fragilidad física de las víctimas. De ellos, solo un porcentaje menor a la totalidad son femicidios, que representan menos del 25 por ciento”.

Datos

Entre los números que destacó el informe se conoció que de los 155 homicidios dolosos de mujeres registrados entre 2015 y 2021, el 23% tuvo como víctimas a adultas mayores, de entre 60 y 96 años.

Asimismo, 9 de cada 10 homicidios el agresor fue un varón más joven, usualmente, y 2 de cada 3 víctimas sabían quién fue su asesino. Otro dato escalofriante es que el 25 por ciento es cometido por los hijos varones, aunque también están vinculadas las parejas y los vecinos.

El espacio suele ser privado, y en ocasión de robo ocurrieron homicidios en un 36 por ciento de los casos. Como destacó Labozzetta, en el 56 por ciento solo se usó la fuerza física para cometer los homicidios/femicidios, por medio de golpes o estrangulamiento.

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