Finalmente, la Corte Suprema de Justicia sostuvo que Pablo Otero, dueño de la empresa Tabacalera Sarandí, debe pagar los impuestos adeudados y revocó las medidas cautelares que había presentando.

Sin embargo, el también conocido como "Señor del Tabaco", no lo hará hasta que el Juez de primera instancia, Enrique Lavié Pico, se adecúe a lo determinado por el Máximo Tribunal.

A través de presentaciones judiciales que le resultaron favorables, el empresario logró detener el impuesto mínimo al tabaco; así logró un crecimiento abrupto en el sector. De tener una participación en el mercado del 5,6 por ciento en 2016 llegó al 38,4 en 2023.

La empresa había pedido la inconstitucionalidad de los artículos 103, 104 y 106 de la Ley 27.430 mediante una acción declarativa de certeza contra el Estado Nacional, el Ministerio de Economía y la AFIP.

Fue entonces que la Administración Federal de Ingresos Públicos en búsqueda de una definición, recurrió a la Corte Suprema y ahora los jueces Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti revocaron las cautelares.

Carlos Rosenkrantz, por su parte, no falló ya que está excusado por haber sido abogado de una de las tabacaleras más importantes del mercado, Massalin.