El caso generó un escándalo mediático hace años. La entonces jueza de Comodoro Rivadavia, Mariel Suárez, había sido grabada mientras besaba durante una visita carcelaria a Cristian “Mai” Bustos, condenado por homicidio.

Finalmente, el magistrado Marcelo Nieto Di Biase decidió cerrar el caso y la sobreseyó; resolvió que la fiscalía no pudo probar la existencia de algún delito.

La acusación que recaía sobre Suárez era que, según sostuvo la fiscal general María Bottini, había solicitado una licencia médica para retrasar una audiencia con el preso y que actuó de manera incompatible con su cargo al involucrarse sentimentalmente con un condenado

Su defensa indicó que esto no fue motivo suficiente para probar que se cometió un ilícito.

"Solicitar un día de licencia no constituye en sí mismo un delito, y las visitas al preso se realizaron dentro del marco permitido", dijo su abogado, Gustavo Oyarzún.

El juez Di Biase, por su parte, afirmó que ese hecho no alteró de forma alguna el servicio judicial ni que existió un perjuicio directo para la administración de Justicia.

Desde el Instituto Penitenciario Provincial, detallaron que Suárez se reunió con Bustos en la cárcel en varias ocasiones pero que se realizaron dentro de los límites permitidos y en tiempos preestablecidos.

Sin embargo, el hecho generó un debate moral y, en noviembre de 2023, el Tribunal de Enjuiciamiento de Chubut la destituyó de su cargo como jueza en Comodoro Rivadavia, alegando falta de idoneidad.

Con la misma resolución, en abril de 2024, el Consejo de la Magistratura decidió apartarla de un concurso para un puesto de camarista federal en Chubut.

"Lo que me sucedió es una represalia por ser mujer. No miden con la misma vara a otros magistrados que han incurrido en acciones similares o incluso peores", dijo Suárez sobre lo ocurrido.