La masiva renuncia y jubilación de jueces profundiza la crisis en la Justicia argentina, mientras que el proceso para cubrir estas vacantes se mantiene estancado.

Uno de los factores que incentiva estas salidas es el 82% móvil, que ante la incertidumbre sobre un cambio en el régimen jubilatorio acelera la pérdida de personal clave.

Aunque el Consejo de la Magistratura ya seleccionó y envió ternas al Poder Ejecutivo, la demora en los nombramientos agrava la falta de magistrados.

El presidente Javier Milei debe elegir un candidato por cada terna y remitirlo al Senado para su aprobación, pero la ausencia de consenso político entre oficialismo, oposición y gobernadores bloquea los avances.

Crisis en el Poder Judicial: para fin de año podría llegar a estar vacante el 36% de los cargos

Recientemente, el viceministro de Justicia, Sebastián Amerio, se reunió con jueces civiles que expresaron preocupación por la falta de conjueces para aliviar la sobrecarga, un problema que se intensifica con la salida masiva de magistrados.

Desde el Gobierno aseguran que los fondos ya fueron asignados, pero las vacantes continúan paralizadas debido a que el Consejo de la Magistratura sólo realizó dos plenarios en el último año, limitando la selección y aprobación de candidatos.

A pesar de las promesas realizadas en noviembre de 2024 por el vocero presidencial, Manuel Adorni, y el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, quienes aseguraron el envío de 150 pliegos para cubrir cargos vacantes, hasta hoy no se ha cumplido esa promesa.

Actualmente, las ternas de candidatos en manos del Ejecutivo han aumentado a 184, sin que se avance en los nombramientos, poniendo en riesgo el funcionamiento judicial, que sufre por la falta de jueces tras jubilaciones y renuncias que dejan sin resolver cientos de causas.