Durante la feria de ciencias del Colegio Guadalupe en Palermo, una explosión causada por un experimento con fuego y alcohol dejó al menos tres menores heridos.
Federico, alumno de tercer año y testigo del incidente, afirmó que “el chico se prendió fuego de pies a cabeza” y agregó: “Se podría haber evitado. Yo estuve mucho tiempo en shock”.
El joven contó que no había matafuegos ni medidas de seguridad visibles durante la actividad.
“Solo dos personas intentaron ayudar, y el profesor se escondió”, denunció, cuestionando la reacción del docente. Según relató, otro profesor buscó un guardapolvo para arrojarlo sobre el alumno en llamas, mientras un tercero se le tiró encima para apagar el fuego.
“El SAME llegó rápido y trasladó a los heridos, uno de ellos con quemaduras graves en rostro y pecho”, indicó.
Los estudiantes manipulaban alcohol y fuego sin la supervisión adecuada, a pesar de que “al comienzo del año nos dieron una planilla sobre seguridad, pero no se cumplió nada”.
Federico concluyó: “Nos dijeron que estemos tranquilos, pero no pueden dejar a menores usar fuego y alcohol sin precauciones. Fue tremendo”.
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