El juicio por el femicidio de Cecilia Strzyzowski continuará este lunes en Resistencia, Chaco, con nuevas declaraciones que podrían ser determinantes.
Entre los testigos previstos están la madre de la víctima, Gloria Romero, su psicóloga María Eugenia Álvarez Piccilli, un perito informático y empleados del clan Sena que estuvieron cerca de César Sena horas después del crimen.
César Sena y sus padres, Emerenciano Sena y Acuña, son los principales acusados por homicidio doblemente agravado en contexto de violencia de género, mientras que otros colaboradores enfrentan cargos por encubrimiento.
El viernes, la madre y abuela de Cecilia repasaron los últimos días de la joven y pidieron justicia.
“Espero justicia por mi nieta y por todos los desaparecidos en democracia. Que no haya nunca más una Cecilia”, dijo la abuela. Detallaron cómo intentaron comunicarse con Cecilia tras su desaparición y cómo fueron alertadas por terceros sobre “algo grave”.
La investigación señala que Cecilia fue asesinada en la residencia de los Sena y que su cuerpo fue luego incinerado en un predio de la familia. Restos hallados en el río Tragadero no pudieron ser identificados por el estado en que se encontraban.
El testigo de identidad reservada “Papa” y la psicóloga de la víctima describieron episodios de control y violencia por parte de César. Cecilia relató a su amigo: “Te juro que no sé qué hacer… Siento que se me viene el mundo encima”, y le contó a su psicóloga que el viaje a Ushuaia fue decidido por él: “Nos vamos a Ushuaia”, evidencia del control que ejercía sobre su vida.
Las audiencias se desarrollarán en el Centro de Estudios Judiciales de Resistencia, bajo estrictas medidas de seguridad y transmisión cerrada, mientras el tribunal continúa evaluando la culpabilidad de los acusados.
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