En su último informe anual, Amnistía Internacional advirtió sobre el deterioro de los derechos humanos en la Argentina durante 2025.
La organización indicó que durante el gobierno de Javier Milei se recortan las políticas para combatir la desigualdad; se fortalecen los presupuestos para controlar, vigilar y reprimir; se aumenta la criminalización de la protesta, el hostigamiento a la prensa y la estigmatización de voces críticas y se niega el acceso a la información pública.
"La verdadera libertad se reduce", remarcaron, y alertaron: "A dos años del inicio de la gestión de Javier Milei, el retroceso de DD.HH. aparece como el resultado de un proyecto político que redefine las funciones del Estado y resigna responsabilidades esenciales frente a la sociedad".
Su directora ejecutiva para la Argentina, Mariela Belski, indicó que este modelo “transmite un mensaje inequívoco: el Estado decidió ajustar precisamente a quienes más debería proteger”.
"Parte de la premisa de que los derechos humanos son un gasto prescindible y que quienes los defienden son enemigos ideológicos”, añadió.
En ese sentido, sostuvo que el costo será “un país más desigual, más injusto y más hostil para quienes ya viven en situaciones de mayor vulnerabilidad: mujeres, personas LGBTTIQ+, adultos mayores, personas con discapacidad, comunidades empobrecidas, entre otras”.
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