El procurador fiscal ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Víctor Abramovich, dictaminó a favor de la revista Barcelona en la demanda interpuesta por Cecilia Pando porque entendió que la sátira política se encuentra amparada por el derecho a la libertad de expresión y revocó la condena indemnizatoria contra el medio de comunicación. 

 

Pando demandó a la revista por una publicaciónen el que se veía un cuerpo atado con sogas con el rostro de Pando, y en la que se hacía referencia a lo ocurrido en el año 2010, cuando las mujeres y familiares de militares presos por causas en las que se investigan crímenes de lesa humanidad se encadenaron a las rejas del Edificio Libertador, donde se encuentra la sede del Estado Mayor del Ejército, y del Ministerio de Defensa.

 

La Cámara Nacional de Apelaciones confirmó el fallo que condenaba a los representantes de la revista a indemnizar a Cecilia Pando por los daños y perjuicios ocasionados por el fotomontaje. El medio de comunicación decidió presentar un recurso ante la Corte Suprema. 

 

Abramovich caracterizó al evento que motivó la publicación como un asunto de interés público y consideró que la misma aludió a una protesta llevada a cabo en el espacio público, que expresa el cuestionamiento por parte de un grupo de personas a los procesos penales por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar. Opinó que la sociedad argentina en su conjunto tiene un interés especial en el desarrollo de esos procesos judiciales y en las políticas públicas de justicia y memoria y que, en consecuencia, resulta también de interés público el debate y los cuestionamientos que aquellos suscitan.

 

También respecto al contenido, consideró dirimente que la composición en su conjunto -la falsa contratapa conformada por fotomontajes y leyendas- haya realizado alusiones dirigidas básicamente a ridiculizar la protesta encabezada por Pando al encadenarse al Edificio Libertador. En su opinión, esa composición buscó construir la sátira a través del absurdo, dando una connotación sexual a la modalidad de protesta de la agrupación encabezada por la actora.