El titular del Juzgado N° 1 en lo Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Rodolfo Ariza Clerici, analizó el trabajo realizado por el fuero durante el aislamiento social preventivo y obligatorio.
El magistrado advirtió que hubo “un notable incremento en el cúmulo de denuncias penales que involucran complejos escenarios de violencia doméstica y violencia de género, con indicadores claros de grave riesgo para la integridad psicofísica de las personas”.
Asimismo, observó que la convivencia entre la Justicia Nacional y la Justicia de la Ciudad, no ha sido pacífica y que surgieron conflictos de competencia. “Podemos afirmar que, en los tiempos que corren, nos enfrentamos a un nuevo ámbito de “normalidad”, en los que la “demora” constituye una afectación concreta a los derechos de las víctimas”, sostuvo en una columna de opinión publicada en IJudicial.
“Debe primar la celeridad del proceso con perspectiva de género, privilegiándose así, los derechos de los justiciables, por encima de discusiones infructíferas de incompetencia entre Nación y Ciudad”, completó.
En ese mismo sentido, destacó los esfuerzos realizados por magistrados, funcionarios y empleados judiciales, en la gestión de audiencias por videoconferencia y la tramitación electrónica de expedientes judiciales.
Por último, enfatizó que la ciudadanía requiere respuestas rápidas y efectivas frente a situaciones de suma gravedad y urgencia como la violencia doméstica o de género. "Para alcanzar este objetivo, resulta ineludible disminuir la litigiosidad en discusiones o contiendas negativas de competencia infructíferas entre ambas jurisdicciones”, concluyó. .
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