La Cámara de Senadores le dio mendia sanción a la Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos. La iniciativa busca regular y controlar el etiquetado, la publicidad y comercialización de alimentos procesados para el consumo humano que contengan un alto contenido de grasas saturadas, sodio, azúcares y calorías.

El proyecto es impulsado desde los ministerios de Salud, de Agricultura, Ganadería y Pesca, y de Desarrollo Productivo, y ya fue aprobado desde las comisiones del Senado.  Asimismo, tiene la finalidad de que el consumidor tenga la mayor cantidad de información. Además, busca descender la tasa de obesidad.

Según la propuesta, los fabricantes o importadores de alimentos que superen los valores establecidos por reglamentación deberán incluir en el frente de su empaque un logo de advertencia para informar que ese producto tiene un alto contenido de sal, azúcar, grasas saturadas o calorías.

También, el logo deberá cumplir con un tamaño mínimo equivalente al 5% de la superficie frontal del envase o el 25% de la publicidad utilizada. 

Uno de los artículos más complejos y determinantes, es que en los establecimientos escolares de todos los niveles, públicos y privados, no podrán venderse, regalar o publicitar ninguno de los alimentos que, por su contenido, deban ser etiquetados. Asimismo, tampoco se podrá emitir publicidad que esté dirigida a menores de 14 años. 

Este cambio en la normativa podría cambiar de raíz las costumbres en los colegios y en los niños, que desde hace muchos años tienen en sus establecimientos kioscos que comercializan golosinas y que están en su mayoría producidas con altos niveles de azúcar y grasas.