Preocupa el continuo aumento de presos federales en alcaldías y comisarías porteñas

La Procuración Penitenciaria de la Nación presentó un nuevo reporte estadístico, que tomó desde marzo 2020 hasta febrero de este año, sobre la situación de las personas privadas de su libertad teniendo en consideración el marco contextual de la emergencia sanitaria que afecta al país desde hace un año, y advierte que algunos números crecieron y presentan un gran riesgo para esa población.

Según afirmó el documento, existe un nuevo récord de personas alojadas en “centros de detención no penitenciarios de la Policía de la CABA, la mayoría de las cuales con prisión preventiva e incluso con condena”, pero, por el contrario, se señaló que hace seis meses la población encarcelada en el sistema penitenciario federal tuvo un descenso producido en los primeros dos meses de la pandemia”.

El informe, detalló que a fines de febrero había 11.611 personas presas en penitenciarias federales, 557 que se encuentran en lugares de la policía de la Cuidad de Buenos Aires, de las cuales 246 están alcaidías y 311 en comisarías. Este registro sería el más alto desde abril del 2020, momento en que se utilizaron esos lugares que eran para la detención transitoria como una plaza de estadía prolongada.

“A fin de febrero, de las 246 personas alojadas en alcaidías, más de la mitad tenían dictada prisión preventiva, y cerca de otra cuarta parte tenía condena”, subrayó.

Otro de los puntos que se destacan es la detención de personas en “en comisarías vecinales”, que funcionan bajo la órbita de la Policía de la Ciudad. Se aclaró en el informe que “tras una denuncia presentada por la PPN, a fines de agosto de 2020, la Justicia Nacional dispuso el traslado a establecimientos del SPF de todas las personas con Coronavirus en alcaidías y comisarías de la Policía de la Ciudad”.

“En la actualidad, la cifra oculta del fenómeno no permite conocer sus reales dimensiones, por lo que es muy probable que el encarcelamiento de personas en centros no penitenciarios sea un problema aún más grave que el identificado”, advirtió el informe.

Las estadísticas desarrolladas en el marco general de los establecimientos carcelarios del SPF indicaron que entre los meses de marzo y abril del 2020 bajó la población penal, y para fines de abril ya no había una sobreocupación. Sin embargo, para el mes de octubre hubo un aumento que a nivel general llevó al 95% de ocupación y algunas unidades continuaron alojando personas por encima de su capacidad oficial declarada.

“El egreso de personas del SPF desde el inicio de la pandemia ha tenido un impacto moderado, sin que se haya verificado una liberación masiva e indiscriminada de personas detenidas. En particular, se observa que desde el mes de junio en adelante se estabilizó la cantidad de egresos de todas las modalidades”, indicó el informe.