Un nuevo proyecto presentado por la senadora del Frente de Todos, Anabel Fernández Sagasti, impulsa la ley para implementar el juicio por jurados a nivel federal en materia penal. La iniciativa está pensada para que haya un juez y 12 jurados, más cuatro suplentes, y contemplará los delitos que el código penal tenga prevista una pena máxima de 15 años de prisión.

Al respecto, el vicepresidente de la Asociación Argentina de Juicio por Jurados y también director del Programa de Juicio por Jurados del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales, Andrés Harfuch, expresó en diálogo con Tiempo judicial que “es el mejor proyecto de los últimos tiempos”.  

“Fernández Sagasti ha sido decisiva, por ejemplo, en el jurado en Mendoza, que se sancionó la ley en el 2018, con un acuerdo político y fue un gran ejemplo”, consideró sobre la creadora del proyecto de ley.

En tanto, consideró que “seguramente este año sea ley, lo pidió el presidente y sin dudas el proyecto es de avanzada”, y explicó que “por un lado protege la experiencia que se hizo en el país y se le agregó el pedido que hizo el presidente de que sea para la jurisdicción federal”.  

“Además, va en línea con lo que pidió la comisión de juristas que asesoró al presidente que le dijo que tiene que haber un juicio por jurado de estas características”, subrayó.  

Si bien todo apunta a que será uno de los grandes debates de este año, Harfuch apuntó a que “en el fondo hay cuestiones de poder enormes”, y lo atribuyó a que “los jueces quieren seguir investigando, no quieren compartir con los fiscales, no quieren ir a audiencias públicas porque el sistema de expedientes escritos y eso permite que firmen los jueces sin rostro”.

El juez Mario Juliano en el simulacro de juicio por jurados en la cárcel de Batán en 2015.

Harfuch aclaró que el jurado sería “conducido por un juez, doce jurados con igualdad de género, y un veredicto unánime para absolver o condenar a una persona, un nuevo juicio en caso que no se da y que sea un veredicto inapelable”, y destacó que “esto se inserta dentro de un conjunto de medidas que llevan a la pronta resolución de los casos”.  

También, enfatizó que el proceso sería más trasparente y rápido, y al respecto ejemplificó: “El caso Chocobar, empezó el juicio en octubre del año pasado y no hay novedades. No es posible que no se conozca nada. Si era por jurados se hubiera hecho en un marco de total transparencia y se resolvía en cuatro días.”