“La garantía que tenemos que dar a la población es que la Corte es independiente y aplica la Constitución, la ley, con serenidad y con templanza. No reaccionamos frente a cualquier coyuntura”, dijo el magistrado en una entrevista hoy con Radio Mitre.

El jurista diferenció las personas que estuvieron en la manifestación contra la Corte. Dijo que hay dirigentes que tienen intereses legítimos para reformar el Poder Judicial y es algo entendible. “Lo que no se puede aceptar es que una persona que tiene una causa judicial o un procesamiento o que ha cometido un delito y es investigada, pida que el juez que lo investiga renuncie; eso es una base en el estado de derecho y el juez tiene que tener la estabilidad necesaria”, explicó.

Lorenzetti recordó que desde su ingreso al tribunal, en 2004, han enfrentado distintas movilizaciones y la respuesta ha sido siempre la misma. “La Corte debe ser independiente y resistir cualquier tipo de presión, venga de donde venga”, dijo. Y reiteró: “La garantía que tenemos que dar a la población es que la Corte es independiente y aplica la Constitución, la ley, con serenidad y con templanza; no reaccionamos frente a cualquier coyuntura”.

Reunión de los ministros de la Corte Suprema en noviembre del año pasado con el ministro de Justicia, Martín Soria.

El 1 de febrero, el dirigente social Luis D’Elía y el juez Juan Ramos Padilla motorizaron una movilización con diversas consignas, que incluían un pedido de renuncia a los integrantes de la Corte. Se sumaron referentes del ámbito sindical, como Pablo y Facundo Moyano, Roberto Baradel, Hugo Yasky y Omar “Caballo Suárez”.

Otros de los organismos que participaran son Abuelas de Plaza de Mayo, Madres Línea Fundadora, H.I.J.O.S. Capital y la Asamblea Permanente por los Derechos humanos (APDH).

El único orador Ramos Padilla dijo que la marcha fue "histórica" para que "se transforme en un servicio de justicia" y finalice la "protección a intereses que no son los propios de los argentinos".