El presidente de la Corte Suprema hizo un repaso del apoyo a los jueces federales que juzgan el narcotráfico y que debe ser una política de Estado en conjunto de los tres poderes.
“La decisión política no debe limitarse a la etapa represiva del delito, el fenómeno debe abarcar factores que son previos y exceden al derecho y al sistema de juzgamiento. Debe comenzar con el sistema cultural, educativo y económico. Lo primero que hay que pensar (y sobre lo que hay que actuar) es en desincentivar las condiciones de surgimiento y progreso del narcotráfico. Lamentablemente, ello no ha ocurrido en la Argentina”, explicó Rosatti en el encuentro de AJUFE en Rosario con presencia de consejeros, jueces nacionales y federales, todos los ministros de la Corte, y funcionarios nacionales y provinciales.
"El Estado cohesionado es importante porque el narcotráfico constituye una manifestación del crimen organizado y no puede ser enfrentado por un Estado desorganizado", aseguró Rosatti en línea con varios reclamos al Ejecutivo con las vacantes de cargos de jueces y la falta de tecnología.
“El compromiso para el juzgamiento del crimen organizado para que la cárcel no controle a la calle” con las “herramientas necesarias para combatir este flagelo. La falta de coordinación es funcional al crecimiento del delito", señaló el hoy presidente del Consejo de la Magistratura de 20 miembros.
Rosatti replicó que se deben cubrir las vacantes de jueces existentes del 50 % de los cargos federales vacantes en la justicia federal de Rosario porque hay que “tener vocación política para combatir este flagelo”. “Los postulantes que hayan demostrado los valores firmes para combatir este flagelo”.
Y coincidió con su par Lorenzetti en que "a la par del seguimiento territorial del fenómeno se siga el camino económico, financiero y contable, el del tráfico del dinero y los activos que genera la actividad ilícita. Destaco en ese sentido la capacitación que brinda la Escuela Judicial dependiente del Consejo de la Magistratura en materia de “recupero de activos”.
El ministro Ricardo Lorenzetti le siguió en el uso de la palabra y propuso ir más allá en esta segunda etapa de combate del narcotráfico: “La desarticulación económica es clave porque si se cierran los grifos y se fortalecer al Poder Judicial la delincuencia va a disminuir”.
Y agregó que “no podemos estar a medio camino como lo estuvimos los últimos años”. Revaloró a la justicia provincial que tomó a su cargo las consecuencias de los delitos del narcotráfico como “los homicidios” entre las bandas. “Cooperar es una demostración de lo que hay que hacer”, enfatizó Lorenzetti quien también propuso como última fase “un sistema carcelario adecuado y federal que hoy está en una situación crítica”.
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