La Asociación de Fiscales mostró su preocupación por las amenazas en Rosario

Mediante un comunicado la Asociación de Fiscales y Funcionarios del Ministerio Publico Fiscal de la Nación (AFFUN) se pronunció sobre las amenazas a fiscales que trabajan en el Poder Judicial de Rosario, provincia de Santa Fe. En concreto, se trata de las amenazas que sufrieron  la fiscal Valeria Haurigot y el fiscal Franco Carbone el pasado lunes 19 de diciembre.

En medio de la audiencia en la que los fiscales realizan la imputación a un integrante de una estructura criminal dedicada al narcotráfico, en el Centro de Justicia Penal de la ciudad de Rosario, se escuchó: "Esto no va a quedar así". Lo dijo  Julio Andrés Rodríguez Granthon, que está preso en el penal federal de Ezeiza, donde cumple dos condenas por tráfico de cocaína en Rosario.

El lunes, durante la audiencia imputativa, dijo esas palabras. Es acusado por liderar desde la cárcel una presunta banda dedicada a extorsiones y balaceras en la ciudad. Los fiscales imputan, además de Rodríguez Granthon, a otras 19 personas entre las que se encuentran tambipén el padre y la pareja de este.

Desde AFFUN explicaron que se "viene denunciando hace bastante tiempo, con profunda preocupación, que en varias jurisdicciones de nuestro país, en donde se han realizado imputaciones a cuadros superiores de organizaciones delictivas o a imputados con alta trascendencia social". Además, explican que "se ha pretendido atacar las investigaciones judiciales amedrentando la persona de los operadores, en especial a los fiscales, los que son víctimas, lamentablemente con mayor frecuencia, de serias amenazas con motivo de su tarea".

El comunicado, que lleva la firma del presidente de la Asociación Ricardo Toranzos y del secretario General Alberto María, hace llegar la "solidaridad" de esa asociación  e insta " a las autoridades a que garanticen su seguridad, “para que puedan ejercer sus funciones profesionales sin intimidación, trabas, hostigamiento, injerencias indebidas”. "Este tipo de ataques, a los fiscales como a sus dependencias, se convirtió en una habitualidad en la zona", dice la misiva difundida.