El expresidente de la Nación, Alberto Fernández, apeló hoy su procesamiento en la causa por violencia de género contra su expareja, Fabiola Yañez.
Silvina Carreira, su abogada, realizó la solicitud para que la Cámara Federal dicte su sobreseimiento y el juez Julián Ercolini aceptó el plateo y lo elevó.
En la apelación de 59 páginas se objetó la “vaguedad de la imputación, contradicción en las circunstancias temporales de los hechos”.
A su vez, indicó que “la falta de una relación clara y circunstanciada en relación al modo, tiempo y lugar de los hechos atribuidos violenta la garantía aludida en la inteligencia de que una acusación deficiente no permite una defensa eficaz al no conocer el imputado de qué ha de defenderse concretamente”.
Se cuestionó también el hecho de no permitirle acceder al teléfono celular que le secuestraron y que lo necesita “a efectos de adunar pruebas de descargo en el marco de la declaración indagatoria recabada, lo cual implica un menoscabo suficiente per se para anular el acto en cuestión.”
Además, volvieron a mencionar supuestas adicciones de Yañez: “A raíz de su problemática con el alcohol, era habitual que sufriera caídas que provocaban lesiones en su cuerpo”.
Por último, también cuestionaron el embargo de $10.000.000 sobre Fernández ya que "importaría un colapso de su economía y una injusta limitación sobre un derecho constitucionalmente protegido".
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