A partir del secuestro de teléfonos celulares que hizo el juez federal Sebastián Casanello, se dio a conocer el dato de que 20.500 personas habrían asistido a la fiesta electrónica Time Warp en la que el viernes 15 fallecieron 5 personas, cuando la capacidad máxima del lugar es de 13 mil asistentes. El dato surge de una conversación entre los organizadores del evento. "Todo hace pensar" que durante aquella noche hubo "una zona liberada donde cada cual podía vender pastillas por cuenta propia", expresó el fiscal en radio Vorterix.

 

Según informaron varios testigos, en la fiesta las condiciones eran de hacinamiento, faltaba ventilación y los "centros de hidratación" no daban a basto por el calor agobiante. A ello se suma, lo que el fiscal Federico Delgado investiga por la muerte de los 5 jóvenes: la venta de drogas dentro del complejo. Además de las víctimas fatales, otras 5 personas se encuentran todavía internadas también por fallas en el organismo debido al impacto de la droga "Superman", una droga sintética que simulaba ser éxtasis. 

 

El fiscal determinó, luego del allanamiento al complejo Costa Salguero, que allí "se toleraba la venta de drogas". Explicó que el paso siguiente será establecer qué grado de responsabilidad tenían los organizadores de la fiesta y los encargados del lugar en esa transacción, averiguar si se fomentaba. "Era una zona liberada donde cada cual podía vender pastillas por cuenta propia", subrayó. 

 

Con respecto a la irregularidad del exceso de personas, dijo que fue una "responsabilidad mixta" de los organizadores y de las autoridades del gobierno de la Ciudad. Y agregó: "Casi todos los testimonios coinciden en algunos puntos: hacinamiento, cantidad de gente, escasa ventilación, venta de drogas, escasez de agua y falta de atención médica".

 

El organizador local de la fiesta Time Warp, Adrián Conci, permanece detenido por Delgado desde el lunes. El jueves, tres personas fueron detenidas acusadas de proveer las drogas sintéticas en el evento y ya prestaron declaración frente al juez federal Casanello que investiga si existe una red de dealers interna en donde los organizadores de la fiesta estén involucrados.