Al concluir su alegato, los representantes del MPF solicitaron la pena de prisión perpetua para Carlos Telleldín como único acusado en este juicio por el delito de “homicidio cometido por la utilización de un medio idóneo para crear un peligro común”, es decir, entregar la camioneta Traffic que luego explotó en la sede de la AMIA en Pasteur 633 hace 26 años.

El Ministerio Público Fiscal representado por los fiscales federales Roberto Salum, Santiago Eyherabide y Santiago Roldán lo acusan a Telleldín de ser partícipe necesario del atentado a la AMIA cometido el 18 de julio de 1994 en donde murieron 85 personas y hubo cientos de heridos.

 La calificación legal en la que la fiscalía encuadró la conducta del único acusado en el debate fue la de homicidio cometido por la utilización de un medio idóneo para crear un peligro común, previsto en el artículo 80, inciso 5, del Código Penal.

Tras la segunda jornada de alegatos de los fiscales, el fiscal Salum culminó este miércoles con el alegato en el cual señaló que al ex reducidor de autos se le endilga en este proceso penal su “participación necesaria con dolo eventual” en la voladura del edificio de Pasteur y que aún no encuentra a sus responsables para que los familiares de las víctimas tengan justicia.

Salum explicó que la intervención de Telleldín “fue con dolo de participación” de acuerdo a las pruebas presentadas en el expediente y que según “las diferentes teorías del dolo eventual: actuó con indiferencia y egoísmo”.

“El armado de la camioneta, las condiciones de esa operación, el contexto, las características casi a paso de comedia de quien se la llevó y haber confeccionado un documento con datos falsos, generan las condiciones necesarias y suficientes para la representación de su aporte: que la camioneta Trafic podía ser cargada con explosivos” y luego fue utilizada en un atentado, tal como había ocurrido dos años antes en el ataque a la Embajada de Israel, detalló Salum ante el Tribunal Oral Federal N°3 presidido por el juez Andrés Basso.

En el atentado a la Embajada de Israel de marzo de 1992 también se utilizó una camioneta cargada con explosivos pero no “melliza porque se trató de una exportación de una forma de violencia novedosa en la región”, que “supimos todos y también Telleldín”, agregó Salum. “No es un antecedente nimio: estos atentados cambiaron hasta el paisaje urbano, basta ver las barreras físicas instaladas al frente de las instituciones”, graficó.

El 17 de marzo de 1992 a las 14:45 una camioneta bomba explotaba en el corazón de la Ciudad de Buenos Aires. Tenía como objetivo volar la Embajada de Israel en Argentina, en la esquina de Arroyo y Suipacha. Era el primero de los dos atentados que sacudiría al país en los años noventa. Ese ataque dejó 22 muertos y 242 heridos.

La próxima audiencia vìa remota será el miércoles 2 de diciembre, ocasión en la que será el turno para alegar de la defensa de Telleldín. El único acusado tiene como defensoras oficiales a Verónica Blanco y Verónica Carzoglio. 

AMIA hoy. (crédito: fiscales.gob.ar)

¿Qué penas pidió la querella de familiares y de la AMIA y la DAIA?

La querella de los familiares de las víctimas del atentado a la AMIA, representada por Horacio Etcheverry, solicitó el miércoles pasado al Tribunal Oral Federal 3 la pena de prisión perpetua para Carlos Telleldín acusado de entregar la camioneta que explotó en el garage al lado de la mutual judía hace 26 años.

La semana pasada el abogado de AMIA y DAIA, Miguel Bronfman, había solicitado 20 años de prisión para Carlos Telleldín y había presentado innumerables pruebas en su alegato contra el vendedor de autos que según el abogado tenía conocimiento que la Traffic que preparó tenía como objetivo cometer el atentado terrorista que dejó 85 muertos y cientos de heridos.

La querella unificada de los familiares de víctimas del atentado estuvo representado hoy por el abogado Horacio Etcheverry quien expresó vía Zoom que “está probado que Telledín alias ‘el enano’ entregó la camioneta para el atentado y que entre los escombros fue hallado un motor de camioneta Renault Traffic”.

“El montaje del vehículo fue para ocultar el verdadero motivo del destino de la camioneta”, sentenció el abogado sobre las dos camionetas que “preparó” Telleldín con boletos de compra venta falsos para simular la entrega de la Traffic para el atentado el 18 de julio de 1994.

En tanto, Etcheverry dio detalles del objetivo claro del atentado contra la comunidad judía en su alegato: “Quien planificó el atentado eligió la sede de la AMIA y la DAIA como blanco con una sólida construcción con custodia permanente y ubicado en una zona geográfica principal con el objetivo de matar a personas de la comunidad judía por odio racial”, explicó.

Por este motivo pidió la pena de prisión perpetua para Telleldín por el “homicidio doloso reiterado calificado por odio racial o religioso” de 85 personas que murieron en el atentado en 1994. 

El miércoles anterior, el histórico letrado de AMIA en los juicios, Miguel Bronfman, según contó a Tiempo Judicial, en el juicio “está acreditada su participación criminal en el hecho terrorista ocurrido aquella trágica e imborrable mañana del 18 de julio de 1994”, sentenció la voz de Bronfman quien cree en la culpabilidad del “revendedor de autos” y en la “conexión local del atentado”.

Bronfman dio más datos de las pruebas contra el “revendedor de autos”. Desde la querella, entienden que “está probado que la camioneta Traffic que preparó y entregó el acusado fue ingresada en la playa de estacionamiento Jet-parking, ubicada a pocas cuadras de la AMIA, el viernes 15 de julio de 1994”.