El juez Sebastián Casanello procesó este lunes al líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, por administración fraudulenta contra el Estado argentino.

El magistrado señaló que desvió fondos del Plan Potenciar Trabajo que le fueron otorgados durante los años 2020 a 2022 mediante el uso de facturas apócrifas y una empresa fantasma.

El fallo incluye también el procesamiento de otras 17 personas, algunas acusadas por fraude y otras de amenazas.

Según indicó Casanello, se comprobó que se desviaron los fondos que el Estado nacional remitía a la Asociación Civil Polo Obrero y a la Cooperativa de Trabajo El Resplandor.

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Entre junio de 2020 y diciembre de 2022 existieron cinco convenios entre la Secretaría de Economía Social e intermediaros por un monto de $361 millones y que parte del dinero fue desviado mediante la utilización de facturas "truchas" y la empresa Rumbos -sin actividad real-, para financiar la actividad partidaria del Polo Obrero.

“El desvío de los fondos no fue inocente, ni accidental sino planificado y dirigido hacia una finalidad en particular: financiar la actividad político-partidaria de la agrupación”, señaló Casanello.

Tras conocerse el fallo, Belliboni sostuvo que "sigue una línea de persecución política".