El suspendido juez de la Cámara Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal Eduardo Freiler pidió que se declare la "nulidad" de la resolución del Consejo de la Magistratura de la Nación que lo ordenó la interrupción en su cargo por seis meses y abrió un juicio político en su contra por mal desempeño de sus funciones. 

 

El 17 de agosto, en el Plenario del órgano que tiene a su cargo la selección de magistrados y la administración del Poder Judicial, con la falta de uno de sus miembros y una mayoría circunstancial. 

 

 

"La resolución que aquí impugno es producto de una indiscutible desviación de poder que alteró deliberadamente el equilibrio de las representaciones en el seno del Consejo", expuso Freiler al referirse a supuestas anomalías para evitar que alguno de los dos legisladores que ofreció como testigos estuvieran presentes en la sesión en la que se resolvió suspenderlo.

 

Para el suspendido camarista, el trámite en el Consejo "estuvo plagado de irregularidades e ilegalidades que afectaron los principios de legalidad y razonabilidad que deben imperar en un proceso disciplinario, y con mayor celo cuando quien se investiga es un magistrado, en tanto se pone en juego y riesgo la independencia judicial".

 

Freiler dijo que en el Plenario hubo una "desviación de poder, con el innegable propósito 
de acelerar aun más los tiempos y someter a votación el dictamen acusatorio sin la presencia del Senador País". 

 

A las 9 de la mañana de ese día, antes del plenario, estaba prevista la toma de juramento de Mario Pais, el reemplazante del senador del Frente para la Victoria Ruperto Godoy, quien fue expulsado del organismo por una sentencia judicial que determina que los integrantes del organismo deben ser abogados. Sin embargo, el presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, retrasó la jura de Pais. 

 

Mientras tanto en el Consejo, según lo que Freiler denuncia, "el consejero Mahiques, representante del Poder Ejecutivo, propuso la alteración del orden del día para dar tratamiento y en primer lugar, es decir en ese momento e inmediatamente" el dictamen Nº 65/2017, que finalmente lo terminó suspendiendo de sus funciones. 

 

Para Freiler se trató de una "inocultable maniobra" para evitar la incorporación de Pais y "aprovechar" la disminución de los votos necesarios para aprobar su suspensión. 

 

Freiler afirmó que luego de una denuncia por "enriquecimiento ilícito", se le atribuyó una "vida con lujo asiático", pero concluyeron acusándolo por "mal desempeño" en función de fallos de su autoría y supuestas irregularidades en sus declaraciones juradas, deudas impositivas, "un inexistente desequilibrio entre mis ingresos y egresos en base a erróneas presunciones".

 

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