En el hallazgo del cuerpo que apareció en el Río Chubut, en la Pu Lof de Cushamen, el pasado 17 de octubre en la zona donde se lo vio por última vez a Santiago Maldonado, fueron claves el bombero Ricardo Urquiza, y el perro ovejero alemán Toby, del cuartel de la ciudad cordobesa de Deán Funes.

 

El cuerpo al que mañana a las 9:30 se le realizará una autopsia en la morgue judicial del cuerpo médico forense en Junín 762, Ciudad de Buenos Aires, fue encontrado a partir de que el juez de la causa, Gustavo Lleral, pidiera la colaboración de bomberos de diferentes provincias que tuvieran perros adiestrados en búsqueda de personas vivas o muertas.

 

 

 

"Desde la Federación de Bomberos Voluntarios de Córdoba informamos que el binomio a cargo del hallazgo del cuerpo en el río Chubut pertenece a nuestra entidad", informó la fuerza que reúne a la mayoría de los 174 cuarteles provinciales.

 

Urquiza contó que la zona en la que se detectó el cadáver estaba "a unos 300 metros del portón donde supuestamente se inició el corte de ruta" y "a 100 metros de donde había una casilla de control de los mapuches". Precisó en diálogo con Cadena 3 que "no estaba río arriba como manifestaban algunos".

 

El efectivo detalló el momento del hallazgo como de "dolor por la persona que falleció" y al mismo tiempo de "satisfacción" de formar a un perro para esta actividad y cumplir el objetivo.

 

El bombero explicó que el perro "detecta el olor cadavérico" y que el ser humano, "cuando entra en proceso de putrefacción despide una especie de partículas, que van a la superficie, y son las que detecta el perro y hace una marcación".

 

Sobre las características del río, describió: "Es un río que no es muy ancho, serán unos 30 metros. Se encuentra un poco crecido, está en proceso de deshielo y de agua bastante fría, y toda la orilla del río es tupida de vegetación de árboles".