A partir del paso de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado (Dajudeco) a la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN), a la oficina de escuchas telefónicas se le sumaron las facultades de realizar análisis financieros, mapas de relaciones, perfiles económicos y rastreos en redes sociales.

 

El diario La Nación accedió a informes de gestión de la Dajudeco en los que se detalla que se desarrolló tecnología, sumó personal y creció en sus facultades como la búsqueda de patrones comunes en bandas criminales, el cruce datos de personas físicas y jurídicas y la realización de estudios sobre la administración pública.

 

Según esos archivos, en 2017 se realizaron 29 mil informes especiales con "datos registrales" e "información asociada", confeccionados por la oficina a pedido de jueces y fiscales. Según el diario El Cronista, la dependencia intervino a 1941 abonados en 2017, mientras que el año anterior habían sido solo 898. Entre los objetivos que se plantea el organismo figuran proyectos para "mejorar e incorporar software para agilizar las interceptaciones y el análisis de las captaciones".

 

Desde que depende de la Corte, la Dajudeco creó un "Departamento de Análisis Patrimonial y Financiero" y otro de "Análisis Normativo". Por requerimiento de un magistrado, la oficina ahora puede efectuar análisis de Nosis y de Veraz de personas bajo la lupa de la Justicia.

 

Los delitos del Gobierno también son inspeccionados por la oficina de escuchas. A fines del año pasado, se anexó a esa dependencia el Cuerpo de Peritos Especializados en Casos de Corrupción, que elabora dictámenes y pericias. Está conformado por ocho profesionales: cuatro contadores, tres ingenieros civiles y un abogado. Se espera que ese cuerpo sume más infraestructura y recursos humanos.