Desde varios años que la comunidad mapuche Paicil Antriao, ubicada en Villa La Angostura, sufre la persecución por territorios ancestrales pretendidos para emprendimientos hoteleros. Uno de los que inició causas contra las comunidades es el ex basquetbolista Emanuel Ginobili que no sólo los denunció por presunta usurpación sino que este año se comenzó, en medio de una mediación con la comunidad que se lleva adelante en la causa penal, una demanda civil contra los mapuches.
Ginobili compró en 2004 doce hectáreas en el cerro Belvedere a los hijos del que fuera intendente de Villa La Angostura durante la última dictadura cívico-militar-eclesiástica, José Salamida. Salamida, en plena dictadura se lo había comprado a un mapuche analfabeto, algo que consta en la propia escritura ya que firmó con el pulgar. Después de comprar los terrenos comenzó la persecución judicial a los mapuches, en 2007 los denunció por usurpación. El ex basquetbolista plantea que adquirió las tierras en buena fe y que le pertenecen.
El juicio contra los mapuches por usurpación era casi un hecho y hasta tenia fecha de inicio. La defensa de los mapuches había pedido que sea convocado como testigo. Sin embargo la justicia no aceptó el pedido y lo raro resultó ser que Ginóbili es quien reclama esas tierras como propias y es quién tiene interés concreto en el juicio pero para la justicia "no corresponde" que se siente como testigo. Finalmente el juicio penal fue suspendido porque se pasó a una instancia de mediación que, producto de la pandemia, está demorada.
"Estamos en una instancia que quedó suspendida de mesa de diálogo" cuenta a Tiempo Judicial Florentino Nahuel, werken (vocero) de la comunidad, y agregó que plantean "la idea del diálogo porque es la mejor manera de resolver el problema, no a través de un juicio como lo intenta Ginobili". "Nos acusan de usurpadores y este territorio siempre fue mapuche", reafirma.
La comunidad está elaborando una propuesta para presentar que implica que "se siga conservando como tal, hay especies nativas, flora fauna y medicina", dice explicando: "tenemos una relación con ella, que se conserve tal cual y que no sea impactado". La cosmovisión mapuche tiene muy en cuenta a la naturaleza. "Instalar un mega hotel de cinco estrellas que iba a provocar un impacto de la naturaleza, porque va contra de nuestros principios porque somos parte de la naturaleza", cuenta Nahuel.
Unos intentan el diálogo, otros las demandas
En medio de un proceso de mediación, Ginóbili inició una demanda civil contra la comunidad. Comenzó un juicio de reivindicación donde desconoce a la comunidad como pueblo originario y quiere demostrar que es el titular del dominio. También trascendió que se retiraría de los juicios si se lo indemnizaba.
Ginóbili posee una imagen de gran deportista que se adosa a la de una buena persona. Nahuel se refiere a esa imagen de "buena persona" que tiene el ex basquetbolista: "Suena raro, el se hace ver como esa gran persona, será con la sociedad civil, con jóvenes fanáticos del básquet. Hay parte de la sociedad lo aprecia, pero no entendemos esa lógica porque a nosotros nos niega, el mismo Ginóbili se ha encargado de decir que no hay comunidades mapuches, es un acto de discriminación hacia nosotros", cuenta el werken de la comunidad.
Entonces, Emanuel Ginóbili, a través de sus abogados, por un lado es querellante en un juicio penal contra la comunidad por el supuesto delito de usurpación y por el otro lado va a la justicia civil a iniciar un juicio de reivindicación. Hay que recordar que la mediación penal fue solicitada por el propio Ginobili cuando el tema tomó algo de relevancia hace unos años.
Las acciones judiciales del ex basquetbolista no son las únicas que sufre la comunidad. Hay más causas de la comunidad Paincil Antriao, como las que la enfrentan a la propia municipalidad de Villa La Angostura. En otra tiene que ver por la construcción de de una avenida de circunvalación para que los camiones provenientes de Chile y que demandaría la deforestación de terrenos. También está otra por el camping del lago Correntoso, donde los Paincil Antriao consiguieron un fallo de cámara a favor de permanecer allí hasta que se cumpla la Ley 26.160 de relevamiento territorial.
Historia y responsabilidad estatal
Sebastián Valverde, antropólogo, investigador del Conicet y docente de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA realizó un estudio durante 2006/07 acerca de la comunidad y detalló que los baqueanos de las familias Paichil y Antriao fueron quienes marcaron los límites de la cordillera, y en pago a tal servicio en 1902 Julio Argentino Roca les otorgó las tierras que ahora vuelven a estar en disputa. Esto figura según el informe en el Expediente Administrativo N°118 del año 1936 de la Dirección de Parques de la Nación. A esto se suma que en 1943 el Estado Nacional le Transfiere de manera definitiva en propiedad a los herederos de los mapuches Paichil y Antriao el Lote Pastoril 9, título 18.504.
"Hay una intención por parte de los intereses económicos y empresariales", detalla Nahuel sobre la situación que sufre la comunidad que se traduce en que "ellos consideran que somos usurpadores del territorio". "Los gobiernos tienen grandes responsabilidades acá pero se lavan las manos", advierte el werken y recalca que "el gobierno provincial no quiere aplicar la ley 26.160 porque tienen vínculos con los privados que se instalan en nuestro territorio, la provincia es cómplice de esta maniobra".
"Al no hacerse cargo de esta situación de conflicto, la justicia avanza y tenemos una justicia perversa y cómplice del ladrón de nuestro territorio y no de nosotros, el derecho indígena lo ignoran", concluye Nahuel.
La ley 26.160 declara la emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan las comunidades indígenas originarias del país, y evita el desalojo de las comunidades. Sancionada en 2006, ya fue prorrogada tres veces y este año debería volver a ser prorrogada ya que su vigencia termina en noviembre
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