El comunicado se emitió unos días después del aniversario del atentado, ocurrido el 18 de julio de 1994, y que dejó un saldo de 85 muertos y más de 300 heridos.

“El informe de inteligencia del Mossad es un nuevo ejemplo del uso de la causa AMIA para favorecer intereses que responden más a la coyuntura política nacional e internacional que a una genuina búsqueda de verdad y justicia”, enfatizó el comunicado que emitió la organización Memoria Activa, que nuclea a un sector de los familiares de las víctimas del atentado a la mutual judía.

El motivo de dicho documento es que, como se explicó, recientemente el diario The New York Times “publicó un artículo donde señala que, según el Mossad (una de las agencias de inteligencia de Israel), los atentados a la Embajada de Israel (1992) y a la AMIA (1994) no habrían sido realizados por Irán sino por una célula de Hezbollah y sin colaboración local”.

Para los integrantes de la organización, detallaron, esto “rebate ‘las sospechas en Argentina de que funcionarios locales y ciudadanos habían sido cómplices de los ataques’, y destacaron que “si bien la información de la nota periodística contradice la hipótesis oficial sobre la responsabilidad de Irán, basada en informes de la ex SIDE y agencias extranjeras, en realidad, se trata de más de lo mismo”.

En tanto, consideraron que “desde el comienzo, quedó claro que se manipuló la causa AMIA en función de intereses políticos locales e internacionales que nada tienen que ver con la búsqueda de verdad y justicia”.  

Tambien, y en mención sobre el recorrido jurídico, recordaron que “el intento del ex juez Juan José Galeano, con la colaboración de la abogada de la DAIA Marta Nercellas, de instalar, en 2001, que el atentado a la AMIA había sido perpetrado por Al-Qaeda y Bin Laden. Versión muy conveniente por ese entonces”.“

La causa AMIA necesita más pruebas judiciales y menos informes de inteligencia”, enfatizaron y concluyeron: “Más apego de los investigadores a la verdad y menos operaciones de prensa. Que se deje de manipular y usar el caso en función de los avatares de la coyuntura política nacional e internacional. Es imprescindible contar con una Justicia seria y creíble, capaz de garantizar una investigación imparcial que nos acerque, de una vez por todas, a la verdad y a la justicia”.