Este viernes, el presidente Javier Milei asistió al acto de graduación en la Escuela de cadetes de la Policía Federal y dio un discurso en el que apuntó contra el "garantismo" y agradeció a la fuerza.
"Lamento los años de escarnio a los que fueron sometidos por hacer una de las cosas más honorables que puede hacer un ser humano que es estar dispuesto a dar la vida por otro", indicó el mandatario en su discurso acompañado de la vicepresidenta, Victoria Villarruel, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Durante su aparición también enumeró cuáles son los tres pilares de su política de Seguridad: “1) El que la hace, las paga, el delito hay que castigarlo, dentro de la ley todo, fuera de la ley, nada; 2) el orden público es sagrado, no se puede secuestrar la calle y arruinarles la vida a todos los argentinos; 3) los buenos son los de azul, los malos los que roban, delinquen y matan. Hemos aplicado estos tres pilares y estamos dando un giro de 180 grados".
Fue entonces que criticó en duros términos a la doctrina garantista defendida por ciertos sectores judiciales y sociales.
En ese sentido indicó que durante el kirchnerismo “se hacían doctrinas para defender criminales a través de dislates argumentativos que escondían la verdad”.
“Entendieron a los delincuentes como víctimas de sus circunstancias, desprotegieron a la sociedad y le dieron la espalda a las fuerzas policiales. Llegaron al absurdo de liberar presos o castigar a policías honorables por el imperdonable delito de hacer bien su trabajo”, indicó al tiempo que sostuvo que gran parte de eso está vinculado a “la penetración de la izquierda en las instituciones”.
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