"En Argentina no hay una tradición de cooperación, faltan políticas de Estado para el acuerdo entre los poderes judiciales", dijo el presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN), Ricardo Lorenzetti, este mediodía en el Palacio de Justicia en el acto de apertura del año judicial sobre la transformación sistemática de la Justicia para "fortalecer su independencia".
En el día de hoy y de mañana, en nueve comisiones integradas por referentes de los poderes judiciales nacional y provinciales, el Consejo de la Magistratura y los gremios de los trabajadores judiciales se discutirán los puntos a modificar en cada área como: la creación de una "unidad de ejecución" centralizada, evitar la superposición de jurisdiscciones, la implementación gradual del sistema acusatorio, el establecimiento de procedimientos especiales para acelerar las causas de corrupción, la relación del Poder Ejecutivo y el fuero electoral y los horarios y ferias judiciales.
Imagen: Poder Judicial de la Nación.
El presidente de la Corte estuvo acompañado por los ministros Elena Highton de Nolasco, Juan Carlos Maqueda, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz. Al acto asistieron magistrados, funcionarios, periodistas, representantes de universidades, de colegios de abogados y numerosas autoridades como el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano; la presidenta de la Asociación de Magistrados, María Lilia Gomez Alonso de Díaz Cordero; el Secretario General de la Unión de Empleados de la Justicia Nacional (UEJN), Julio Piumato.
Si bien el titular del máximo tribunal señaló que el Poder Judicial debe "hacer una autocrítica sin pensar en los intereses individuales, de las corporaciones, económicos o políticos", al final del discurso manifestó su descontento con el "agravio permanente" hacia la Justicia. "No todo está tan mal", dijo.
En noviembre pasado, el diario Clarín publicó una encuesta que reveló que la Justicia es la institución con peor imagen pública y que el 78,5 por ciento de los argentinos considera que es necesario reformarla. "No pueden buscar la aprobación de las mayorías ni manejarse por las encuestas. En ningún país del mundo los poderes judiciales tienen altos reconocimientos en las mayorías, porque no es su función", apuntó Lorenzetti.
Días atrás, Centro de Información Judicial (CIJ) publicó un documento con los lineamientos de la política de Estado para la transformación de los poderes judiciales de manera sistemática, "los esfuerzos son individuales pero no se pueden generalizar si no tenemos cooperación". Siguiendo esas pautas, Lorenzetti destacó algunos de los puntos más importantes de la reforma.
En materia penal Lorenzetti propuso "transformaciones intermedias" en la implementación gradual del sistema acusatorio: "Si la aplicación está planteada a nivel federal como un proceso muy gradual que se va a hacer, y parece razonable que así sea, con experiencias pilotos, en el tiempo intermedio —que pueden ser años— tenemos que ser capaces de tomar medidas urgentes, porque los juicios están ahora
y los reclamos de la sociedad son ahora. ¿Y que vamos a hacer con todo este enorme caudal de causas que hoy están en trámite?". En el documento las enumera como "limitación de resoluciones de mérito y apelaciones, audiencias multipropósito, concentración de actos; soluciones rápidas y de calidad; generalización del sistema de flagrancia".
Lorenzetti habló también de la necesidad de "acelerar las causas de corrupción". "Hay una propuesta de hacer un proceso especial en causas de corrupción, porque tienen su especificidad, y para las megacausas, las causas que involucran a muchísimos actores, muchas personas en materia penal", dijo.
En materia civil y comercia, el presidente de la Corte recalcó la necesidad de implementar con leyes procesales, oralidad e infraestructura el nuevo Código Civil y Comercial, en vigencia desde 2015. "En las jurisdicciones civiles del interior del país, en las justicias provinciales, en las jurisdicciones de familia,
necesitamos ahí muchísimas transformaciones, y sobre todo la oralidad", dijo y destacó el proyecto elaborado por el Ministerio de Justicia en esa materia.
Por otra parte, remarcó el imperativo del expediente digital, "debemos ser capaceas de dar respuestas más rápidas", señaló. Y agregó: "El ciudadano que va a un banco, maneja a un celular, está en contacto con el siglo XXI, pero cuando va a un juzgado pasa al siglo XIX. Todavía ve expedientes cosiéndose con hilos. Entonces, ¿cómo puede ser que no seamos capaces de lograr expedientes digitales en todos los ámbitos? El expediente digital es una urgencia, y debemos lograrlo en todas las jurisdicciones. Hay provincias que están muchísimo más adelantadas que la Nación".
Luego se refirió al Consejo de la Magistratura de la Nación, creado en 1994: ¿Cómo es posible que todavía discutamos la constitución? ¿Cuántos miembros tienen que ser y cuántos sectores tienen que estar representados? Todavía hay varios proyectos distintos. ¿No es posible que nos pongamos de acuerdo? Porque si no resolvemos esto, esta institución no nos satisface y entonces tenemos graves problemas".
Además, señaló que el problema del órgano que se encarga de la designación de jueces y de la administración del Poder Judicial es de "diseño institucional y de los incentivos que dan las instituciones". "Una institución que se renueva cada cuatro años de forma total es como que empieza de nuevo cada cuatro años. Una institución que tiene un diseño parlamentario para funciones ejecutivas en la administración no puede funcionar bien. La administración del Poder Judicial es algo que tiene que ser muy rápido", dijo.
En un cruce por la disputa sobre el horario de atención de los juzgados, Lorenzetti dijo: "Tenemos que trabajar fuertemente en mejorar el servicio público que brindan los tribunales. Si cambian las costumbres, si debemos cambiar el horario, bueno, hagámoslo: no puede ser una cuestión tan difícil".
El régimen de la feria judicial, los horarios y las licencias es uno de los puntos a tratar en la comisión número siete de organización del trabajo de los magistrados, funcionarios y empleados judiciales. El titular de la UEJN, Julio Piumato, adelantó a Tiempo Judicial que se opondrá a la extensión de la jornada del trabajador judicial: "No es la solución. No vamos a estar de acuerdo, modificar los derechos judiciales no mejora la Justicia. Hay que hacer reformas de fondo que permitan que la entrega que tiene el trabajador judicial repercuta en el servicio".
Lorenzetti se dirigió a los referentes de los sindicatos de trabajadores judiciales que participarán en las comisiones: "Tienen que participar con un espíritu abierto. Pensemos en el servicio público y no en nuestros beneficios personales, si vamos a tener más o menos tiempo. Hay que pensar un poco más en grande, hacer una autocrítica".
Hacia el final del discurso, el presidente de la Corte habló de las "críticas infundadas" hacia la Justicia. "Pensemos los grandes conflictos que ha tenido el Poder Judicial en los últimos años y hemos salido adelante. Pedimos a todos que reconozcan esas actitudes. Muchos que hacen críticas infundadas fueron beneficiarios en momentos difíciles de decisiones del Poder Judicial", manifestó.
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