El Tribunal Oral Federal 3 a las 13.20 y en una lectura de veredicto que duró escasos 10 minutos a cargo del presidente Andrés Basso absolvió a Carlos Telleldín que estaba acusado de homicidio agravado por acondicionar la camioneta Traffic y conocer que se iba a utilizar para ejecutar el cruel atentado terrorista de 1994 contra la mutual judía AMIA.
Este mediodía el Tribunal Oral Federal 3 absolvió al único acusado en ese segundo juicio que juzgó la responsabilidad de Telleldín en la entrega de la camioneta utilizada para el atentado a la AMIA, ocurrido el 17 de marzo de 1992, el cual dejó un saldo de 85 muertos.
Andrés Basso, juez integrante del tribunal, afirmó que los argumentos del fallo por este juicio oral vinculado al ataque terrorista ocurrido en Pasteur 633 se darán a conocer en una audiencia convocada para el 26 de marzo del próximo año a las 17 horas. Y destacó que "los crímenes de lesa humanidad son imprescriptibles".
Según la querella, Telleldín fue un “partícipe necesario” que ya que conocía para qué iba a ser utilizada la camioneta Traffic que fue entregada a los terroristas que cometieron el atentado.
Por la mañana, en el alegato final en el Tribunal Oral Federal 3, Carlos Telleldín se mantuvo en la misma postura y manifestó su "total y absoluta inocencia”, y apuntó contra las investigaciones tildándolas de "mentiras fraudulentas" para involucrarlo.
Su abogada, Verónica Carzoglio, ya se había manifestado en la misma sintonía en la anterior audiencia y consideró que "condenar por el atentado a un inocente hasta que haya al menos un condenado por el atentado no es hacer justicia", y además, había deslizado unas semanas antes: “Reformularon la acusación con toques de novela turca. Pasó de ser un lumpen doblador de autos a un líder de asociación criminal, un vendedor codicioso. ¿Algo más quieren tirar al asador las partes acusadoras?".
Por su parte, la querella de los familiares de las víctimas, representadas por Horacio Etcheverry, había solicitado la prisión perpetua para el acusado y aseguraba que “está probado que Telledín alias ‘el enano’ entregó la camioneta para el atentado y que entre los escombros fue hallado un motor de camioneta Renault Traffic”.
En su alegato, el abogado de las víctimas señaló: “Quien planificó el atentado eligió la sede de la AMIA y la DAIA como blanco con una sólida construcción con custodia permanente y ubicado en una zona geográfica principal con el objetivo de matar a personas de la comunidad judía por odio racial”.
En cuanto al abogado de la AMIA y DAIA, el letrado Miguel Bronfman, en una entrevista con este medio ya había aseverado que estaba acreditada la participación criminal por el acto terrorista e indicó que Telleldín fue la “conexión local del atentado”.
El abogado había solicitado para el único acusado 20 años de prisión. Siempre se sostuvo desde la querella que la camioneta que vendió, con papeles de compra-venta falsos, y preparó “fue ingresada en la playa de estacionamiento Jet-parking, ubicada a pocas cuadras de la AMIA, el viernes 15 de julio de 1994”.
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