La Cámara de Casación de Entre Ríos solicitó este martes la prisión efectiva del ex gobernador y ex embajador en Israel, Sergio Urribarri, en el marco de la causa por corrupción en la que había sido condenado en el 2022. La misma medida corre para su cuñado, Juan Pablo Aguilera.
El falló fue firmado por las juezas Marcela Davite, Marcela Badano y María Evangelina Bruzzo y pide la inmediata detención del exmandatario condenado a 8 años de cárcel y inhabilitado a perpetuidad para ejercer cargos públicos.
"Ya está detenido. Y Aguilera también. Se están realizando las actas pertinentes", confirmó el ministro de Seguridad de la provincia, Néstor Roncaglia.
Urribarri residía en Concordia, donde se apersonó la Policía y será trasladado a la Unidad Penal 1 de Paraná, allí también alojarán a su cuñado.
La medida había sido solicitada por los fiscales entrerrianos Patricia E. Yedro, Gonzalo A. Badano y Juan Francisco Ramírez Montrull.
Se pidió luego de dar por "acreditados los requisitos de admisibilidad del recurso" y señalaron que para "los mismos solicitaban la prisión preventiva efectiva, fundada particularmente en el riesgo serio de fuga, en atención al monto de la pena y modo de ejecución impuestos por sentencia de 07/04/2022".
En 2022 había sido sentenciado por los delitos de peculado y negociaciones incompatibles con la función pública.
Entre varios hechos, se dio por probado un esquema de retornos en operaciones financiadas por el Estado provincial y las contrataciones por 28,4 millones de pesos para la organización del encuentro de presidentes del Mercosur que se realizó en Paraná en 2014.
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