El ex juez federal y actual ministro de Justicia y Seguridad del gobierno porteño, Dr. Guillermo Montenegro, explicó a Tiempo Judicial los alcances de las ideas en materia jurídica que tendrá el PRO con Macri presidente.
"Macri tiene la idea de generar un Poder Judicial fuerte, autónomo e independiente", señaló y explicó que para los delitos transnacionales planean crear un FBI Argentino llamado Agencia Nacional de Lucha contra el Crimen Organizado, planean una Reforma Integral de la justicia y que combatirán la corrupción brindando transparencia y control a los organismos del Estado. "La justicia tiene fronteras pero los delincuentes no", aseveró.
¿Cuáles son las propuestas generales en materia de justicia en caso de que Mauricio Macri sea presidente?
A nivel nacional está dividido entre justicia y seguridad y creo que es correcto. Creo que lo más importante para el gobierno que venga y ojalá sea Mauricio es la independencia del Poder Judicial. Hay que generar y trabajar entre todos los espacios políticos para que se logre la verdadera independencia de la justicai de la política y que permita generar las investigaciones necesarias para aclararle a la sociedad en que trabajamos todos. Creo que la reserva moral de la democracia está en el Poder Judicial, y creo que la política debe hacer un esfuerzo para trabajar en este sentido. Por más que no te gusten las decisiones que toman los jueces.
Hay que ser muy celoso en hacer respetar la división de poderes que genera la democracia. Hay que darle transparencia a la administración de justicia, y es correcto el control de los actos de gobierno por parte del Poder Judicial. Esto es lo que te da la garantía de la transparencia de los actos de gobierno para adentro y para afuera de la institución, genera tranquilidad en la ciudadanía y también hasta genera seguridad jurídica para la inversión de capitales propios y extranjeros. Invertir en Argentina es bueno porque genera puestos de trabajo y se genera un circulo virtuoso. La pata fundamental sobre todo es la independencia del Poder Judicial.
¿Cómo lograrían llevarlo a cabo?
- Hay que trabajar muy fuerte en la constitución del Consejo de la Magistratura de la Nación. Hay que tener claro que una Corte Suprema con 5 integrantes está bien. Creo que con 9 integrantes sería más lento y atentaría contra la celeridad que se le pide a la justicia. El ataque que sufren tantos Highton de Nolasco, Fayt y Lorenzetti tienen que ver con la política y tiene que ver con desprestigiar una institución que no está despretigiada ni para la mayor parte del Poder Judicial ni para el afuera. La gente entiende que la Corte es un poder y que le genera escozor con sus decisiones al Poder Ejecutivo en general, no sólo al nacional.
El Poder judicial controla los actos de Gobierno. No se puede atacar un juez porque no te gustan sus decisiones. Es desmedido y oportuno porque ahora el Gobierno entiende que su problema es la Corte por eso ataca a sus integrantes, pero hace 5 años no lo sentían como un problema. Creo que la Corte tiene una función de controlar y lo ha hecho bien, y eso es lo que molesta al Poder Ejecutivo.
¿Qué reformas implementarán en la justicia?
Hay que hacer una reforma integral del Poder judicial. Es importante la autarquía porque habla de la independencia pero tiene que ir acompañada con la posibilidad de conseguir los recursos propios para poder manejarlo. Por ejemplo: si a vos te dan un campo en donde no podes cultivar nada, no vas a poder cosechar. Por este motivo, vamos a generar las medidas para que el Poder Judicial tenga mayores ingresos ya sea por el control de las tasas judiciales o el manejo de la obra social o de las propiedades que posee.
Lo más importante es volver a la credibilidad absoluta de la gente en la justicia. Es un quiebre que tenemos que trabajar todos: la política, el Poder Judicial y la gente porque genera una relación de confianza necesaria para la independencia de la justicia. No sólo con los “personajes" que hay en la justicia sino con acciones concretas como: la celeridad en la resolución de las causas o dar la posibilidad de generar acuerdos y que se cumplan.
También una mayor transparencia para generar confianza en el juez. Se puede equivocar pero va a fallar según sus convicciones. Ahora cualquiera discute un fallo. Hay que volver a tener la confianza en las decisiones judiciales. (NdR: lo explicó con una anécdota: en mi época nadie dudaba del juez. Cuando yo era “pinche” y el juez me sacaba un bizcochito y me decía “buen día montenegro”. Para mi era como tocar el cielo con las manos).
Código Procesal Penal ¿Están a favor de un sistema mixto o un sistema acusatorio?
El sistema acusatorio puro rige en la Ciudad de Buenos Aires. Es una herramienta buena, fuerte y necesaria utilizada de buena manera porque yo te puedo dar un martillo y vos lo podes usar para construir una mesa, o para matar a una persona. Hay que tener claro que es necesaria una reforma del Código Procesal Penal, pero hay que tener muchísimo cuidado en el poder ilimitado que le podes dar a los fiscales o al Ministerio Público Fiscal. La estatua de la justicia es clara: la balanza y la ceguera. La herramienta es buena pero hay que ver cómo se utilizan.
La política no puede manejar la reforma del Código Procesal Penal, sino que le tiene que dar al Poder Judicial las herramientas necesarias para implementarlo. La mejor forma de resolverlo es el ingreso de trabajadores por concurso con una seria de lineamientos sumamente claros para que los cargos los ocupen los mejores sin importar su orientación política. Es muy bajo el margen de error de los mejores jueces. Macri tiene la idea de generar un Poder Judicial fuerte, autónomo e independiente y te pueden gustar o no las decisiones sumamente estudiadas.
¿Qué políticas llevarán a cabo con delitos internacionales como el narcotráfico, la trata de personas y el lavado de dinero?
La posición es muy clara y va en la línea de un FBI Argentino o una Agencia Nacional de Lucha contra el Crimen Organizado que abarca los delitos de trata de personas, lavado de dinero, narcotráfico, corrupción y tráfico de armas. Todos tienen una matriz común y esa es el lavado de dinero. Es una matriz con una envergadura a nivel nacional que va a trabajar coordinadamente con las policías federales y provinciales. La idea es poder de centralizar y compatir información. manejar recursos para contratar gente altamente capacitada contra el crimen así como empezó el FBI con 10 personas.
Es una estructura de profesionales, no es otra policía. Un grupo de personas especializadas con muy buen manejo de información compartida con las fuerzas policiales, y administrada desde un solo lugar para evitar triples o cuádruples investigaciones.
La justicia tiene fronteras pero los delincuentes no. Hay que buscar un lugar que para que las fronteras vayan cediendo, como se hizo en Europa con la firma de tratados internacionales, buscando una decisión proactiva dentro de la región generando una posición clara para la lucha contra el crimen organizado en América Latina.
¿Qué medidas tomarán para la prevención o el combate del delito?
Todo lo que tiene que ver con el delito no es aislado de la salud, del problema de vivienda o del trabajo. Todo no se resuelve con policias, cámaras o patrulleros sino que lo que haces es que el delito migre. Esto una política de prevención que tiene que ir integrada con el desarrollo social. La policía es la aspirina, y todo el resto de las policias es el antibiótico que te genera que la infección salga. La desigualdad en nuestro país atenta contra la seguridad, o sea genera inseguridad. Hay que trabajar mucho en la desigualdad sin olvidarte de tener una policía bien paga y equipada, y darle una mística a la policía como se hizo con la Metropolitana pero no es lo único que hay que hacer.
Por ejemplo: Si hay un índice que dice que uno de los focos de incremento de la violencia en los delitos comunes es el consumo de estupefacientes. Entonces, nos planteamos: qué vamos a hacer para tratar de bajar el consumo de estupefacientes, que bajó la edad del que delinque y aumentó el nivel de violencia. No se puede hacer algo aislado en una Ciudad, cómo vas a hacer con el consumidor y no perseguirlo desde el derecho penal, y cómo tratamos de darle trabajo o reinsertarlo en la sociedad.
¿Será una policía similar a la Policía Metropolitana? ¿Cómo controlarán a los policías corruptos?
La policía debe tener una posición dentro de la sociedad, y tiene una vocación de servicio que llega hasta dar la vida por el otro. Entonces, desde la política lo tengo que cuidar y también controlar. La estructura de investigación de la Policía Metropolitana (Asuntos Internos) está por fuera de la fuerza. Está dentro de la órbita del ministerio de Justicia y Seguridad.
Planteamos que haya dentro la policía un grupo dedicado al conflicto ciudadano. La gran mayoría de estos conflictos tiene que tener la presencia del Estado con una policía cercana, de confianza, y comunitaria . Que sea la cara visible de la Ciudad en su conflicto.
¿Qué medidas tomarán contra la corrupción?
Por un lado, vamos a darle una fuerte impronta de control y transparencia a los organismos como la Auditoría General de la Nación o a la Unidad de Información Financiera. Para que manejados por la oposición política bien entendida nos controle y nos ayude a hacer bien las cosas. Tenemos el ejemplo de la discusión en la Ciudad sobre la Ley de Seguridad Pública que creo la Policía Metropolitana con el apoyo del kirchnerismo.
Por otro lado, haremos un Plan de Gobierno Abierto: transparencia y todo en red desde las compras, contrataciones, denuncias a funcionarios públicos, hasta nuestras declaraciones juradas. Tenemos una función pública y social y tenemos que mostrar en que gastamos la plata y cómo vivimos, aunque siempre resguardando nuestra privacidad. En la Ciudad, tenemos el Sistema Único de Denuncias, mecanismo de recepción y centralización de denuncias que promueve el ejercicio de políticas de control y prevención dentro del ámbito de gestión del Ministerio de Justicia y Seguridad.
¿Qué pasará con las causas y los juicios de derechos humanos y de lesa humanidad?
Creo que mi actuación como juez fue clara. Como fiscal y como juez declare la inconstitucionalidad de la Ley de Obediencia Debida y Punto final. Fui juez de la causa de Robo de Bebés y del Plan Cóndor con lo cual procesé a los militares. Tengo una posición tomada que no tiene que ver con una posición ideológica. Como soy un hombre del derecho, si cometiste un delito, vas preso. No importa si sos o no militar. Creo que lo mas importante es darle la tranquilidad a los jueces para que trabajen sin presiones del poder político.
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