El Dr. Roberto Busato, presidente pro témpore del Consejo de Colegios y Órdenes de abogados del MERCOSUR (COADEM) dialogó con Tiempo Judicial sobre los alcances de la creación del CIAR para Brasil así como su relación comercial con los países del bloque, cómo se llegó a formar el Centro de Arbitraje de Iberoamérica tras años de lucha, sumado a las principales características del mismo y su forma de financiamiento.

¿Qué significa para la abogacía de Brasil la creación del Centro Iberoamericano de Arbitraje (CIAR)?


Para Brasil, es importante la creación del centro de arbitraje en el ámbito de Iberoamérica por los negocios que allí se realizan. Es un servicio jurídico absolutamente competente, rápido y seguro para la solución de las controversias que puedan ocurrir en las relaciones comerciales. Brasil es un país de mucha penetración en el comercio mundial, con relaciones muy fuertes con países de Latinoamérica y también con España y Portugal. El Centro de Arbitraje creo que terminará fomentando aún más las relaciones comerciales que ya existen entre los países de Iberoamérica.


¿Hay algún antecedente en Brasil de centros de arbitraje?

Si, tenemos la cámara Brasil-Canadá, o en San Pablo o en varias capital del país se practica arbitraje. La justicia brasileña no responde con la agilidad que necesitan los negocios comerciales. Y el arbitraje es un medio seguro de solución de controversias y es muy valioso la creación de un centro de arbitraje.

¿Sus clientes le solicitan o reclaman no judicilizar los conflictos por el costo económico que acarrea?

Ahí aparece el Centro Iberoamericano de Arbitraje (CIAR) para atender una serie de reclamos que se tengan que atender a través del arbitraje. CIAR pretende atender negocios pequeños y medianos para que con esto se aumenten las negociaciones entre los países de una forma más segura.

¿Qué característica destaca del CIAR?

Los puntos más importantes son que es un centro de arbitraje específico para países iberoamericanos. Que tiene una seguridad muy grande porque se respetará las tradiciones jurídicas de cada país porque tenemos sistemas semejantes. Además de ser una gran ventaja el idioma en español y en portugués.

También creo que la disminución de los costos llevará a que las demandas sean solucionadas de la forma más fácil posible para que las empresas puedan seguir realizando sus negocios medianos y no sólo para los grandes controversias.

¿Qué impacto tiene para Brasil?

Para Brasil es muy importante no sólo por el área física del país sino por la participación de sus empresas en los negocios de todo el mundo. Es una de las mayores economías del mundo, estamos ligados por el Mercosur con Argentina, Paraguay y Uruguay, y tenemos intensas relaciones comerciales. Brasil practica un número muy grande de negocios con Iberoamérica por eso es un país que tendrá muchos clientes que acudirán al CIAR.

¿Qué tipo de conflictos se generan entre Brasil y Argentina por la gran cantidad de negocios comerciales que se realizan entre ambos países?

En los negocios comerciales siempre existe el conflicto por las interpretaciones dudosas. Esperemos que no sea tanto pero es normal en las facturaciones de los negocios la asistencia jurídica para evitar una controversia o resolverla.

¿Cómo será el financiamiento del CIAR?

El financiamiento será básicamente por las cuotas de los miembros de este centro: colegios de abogados, y las cámaras empresarias de comercio. Hay un aporte también de España, Costa Rica y Brasil, y también las costas cuando comiencen los arbitrajes. Así como los honorarios para los profesionales.

¿Tienen pensado tener alguna sede del CIAR en Brasil? y ¿Cuáles son los próximos pasos a seguir?

Este acto cierra una caminata de 8 años, con Brasil acompañando la iniciativa como socio fundador. Este centro de arbitraje tendrá instalaciones en San Pablo y ahora esperamos raalizar una especial divulgación y difusión del CIAR entre los abogados y los empresarios para que sepan que existe este centro y que pueden tenerlo como un órgano de solución de controversias de los contratos comerciales.