Procesaron a un policía por abandonar su puesto como custodio de un supermercado del barrio porteño de Villa Urquiza y posibilitar que dos ladrones ingresaran al local y dispararan a una persona que resultó herida de gravedad. Se presume que el efectivo habría ido a comprar una infusión a un kiosco cercano al momento del robo.
La Sala 4 de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional rechazó el recurso de apelación interpuesto por el policía y procesó al agente por el delito de omisión de deberes del oficio, ya que se habría alejadro de su puesto "sin motivo alguno", dice la sentencia.
El supermercado está ubicado en Monroe 4467, Ciudad de Buenos Aires.
El 30 de abril de 2016, el hombre que tenía consignada la custodia del supermercado ubicado en Monroe 4460 "habría abandonado la puerta de ingreso", lo que posibilitó que dos hombres armados ingresaran al local y le dispararan en el cuello a una persona que estaba dentro, "provocándole heridas de gravedad".
Según declaró otra oficial de la Policía, al momento del robo, el agente procesado estaba charlando con ella en la esquina de la cuadra del supermercado y que "como estaba engripado le sugirió ir juntos a beber algo caliente a un kiosco en las cercanías". En ese momento escucharon las detonaciones y gritos.
Para los jueces Carlos Alberto González y Alberto Seijas, el oficial "se alejó del objetivo asignado y de ese modo incumplió con los deberes a su cargo, no habiéndose acreditado que estuviera impedido de hacerlo con normalidad y diligencia". Y agregaron: "La consigna policial tiene por finalidad la vigilancia exclusiva de un lugar determinado, que no puede abandonarse sin aviso previo a la autoridad".
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